Una vez más, la acción del hombre nos condena a vivir con menos recursos de los que deberíamos tener a nuestro alcance

El agua es uno de los elementos esenciales de la vida. En anteriores artículos te hemos hablado acerca del conocido como ciclo del agua y del tiempo que puede sobrevivir una persona sin beber agua. Sin embargo, es posible que estemos agotando las reservas del preciado líquido mucho más rápido de lo previsto y esto podría tener consecuencias desastrosas.

El agotamiento de las reservas subterráneas de agua

Un equipo internacional de científicos, conformado por expertos de la University College de Londres, la Universidad de California en Santa Bárbara y la Escuela Politécnica Federal de Zúrich, han publicado un artículo en el medio Nature en el que hablan acerca de la imperiosa necesidad de proteger uno de los recursos más preciados del planeta: el agua subterránea.

Los científicos han podido estudiar 170.000 pozos y 1.700 sistemas acuíferos, en más de 40 países, y aunque las noticias no son buenas, siempre existe un rayo de esperanza al que agarrarse, algo que también sucede en esta ocasión.

Según la información publicada en la página web de la University College London, el nivel del agua subterránea disminuye en más de 10 centímetros cada año en el 36% de los sistemas estudiados y más de 50 centímetros anuales en el 12% de los sistemas de acuíferos.

Algunos de los países que destacan entre los que poseen cada vez menos agua subterránea son México, Estados Unidos, Irán y Chile, algo que podría derivar en consecuencias catastróficas, como la filtración de agua marina, que cambiaría por completo sus ecosistemas, o el hundimiento de las áreas que vayan quedándose áridas.

En el caso de España, tal y como puedes ver en el gráfico que te mostramos sobre estas líneas y que ha sido compartido a través de la red social X por Miguel A. Gómez-Serrano, parece que la zona del Mediterráneo austral y el este de Andalucía son los lugares donde la pérdida de agua subterránea está siendo más considerable.

Sin embargo, el estudio ofrece buenas noticias, ya que la investigación también demuestra que sistemas acuíferos de Tailandia, Estados Unidos y España, que empezaban a disminuir en las décadas de 1980 y 1990, han conseguido revertir su situación a través de diferentes medidas, como una regulación en favor de su conservación y trasvases