Las inundaciones en Kenia han dejado un saldo de 188 muertos y miles de desplazados. La respuesta tardía del gobierno y el impacto desproporcionado en los sectores más vulnerables han sido criticados por organizaciones como Human Rights Watch y la ONU. 

Las devastadoras inundaciones que azotan Kenia desde hace semanas han dejado un saldo de 188 personas muertas, incluyendo 37 niños, y han desplazado a miles de hogares, informó el gobierno este jueves.

Cifras alarmantes

Las autoridades kenianas confirmaron que en las últimas 24 horas se han recuperado 9 cuerpos más, elevando el número total de víctimas fatales a 188. La cifra de heridos se mantiene en 125, mientras que 90 personas aún permanecen desaparecidas. Las inundaciones, que han azotado principalmente las regiones del centro, sur y oeste del país, han provocado el desplazamiento de 33.100 familias, afectando a un total de 196.296 personas.

Crítica a la respuesta del gobierno

Human Rights Watch (HRW) ha criticado duramente la respuesta tardía del gobierno keniano ante la crisis de las inundaciones, a pesar de contar con previsiones meteorológicas que anticipaban el desastre. Nyagoah Tut Pur, investigadora para África de HRW, enfatizó la responsabilidad del gobierno de actuar de manera inmediata frente a los efectos del cambio climático y los desastres naturales.

Impacto desproporcionado en los sectores más vulnerables

La organización también ha señalado que la destrucción causada por las inundaciones ha intensificado las vulnerabilidades socioeconómicas en el país, impactando de manera desproporcionada a los sectores más desfavorecidos de la sociedad.

Por su parte, la ONU ha alertado que la devastación provocada por las lluvias ha agravado las dificultades socioeconómicas existentes, afectando de manera más severa a las personas de bajos recursos, a los habitantes rurales, a los ancianos y a las personas con discapacidades.

Un informe reciente de la Autoridad Nacional de Gestión de la Sequía indica que las tormentas han exacerbado la escasez de alimentos en Kenia, con cerca de dos millones de personas en necesidad de asistencia alimentaria. Además, las lluvias han causado el desbordamiento del río Talek, resultando en el rescate de más de 90 personas, incluyendo turistas, en la reserva del Masái Mara.

Se esperan más lluvias

Las autoridades kenianas prevén que las tormentas continúen al menos hasta la próxima semana, con pronósticos de lluvias intensas durante el resto del mes. El fenómeno de El Niño ha intensificado la temporada de lluvias, que se extiende de marzo a mayo, afectando también a otros países del este de África. El desbordamiento de ríos ha impactado severamente, especialmente en el condado de Nakuru, donde al menos 71 personas han perdido la vida.