¿Y si los cocodrilos tuviesen una mayor empatía emocional de lo que pensábamos? He aquí una nueva teoría que podría cambiar nuestra impresión sobre estos animales.
La empatía emocional es algo que, en cierto sentido, también se encuentra en la fauna. Los animales nacidos y desarrollados en la naturaleza pueden desarrollar ciertos sentimientos próximos a animales que, en teoría, deberían ser sus víctimas. En alguna que otra ocasión se ha podido ver alguna manada dejando ir a alguna cría de impala o antílope. Esto se había visto anteriormente con mamíferos, pero ¿qué decir de los reptiles? Un nuevo estudio podría cambiar la impresión que se tiene de animales como los cocodrilos.
Ciencia
Existen muchos ejemplos de animales que han sido criados con seres humanos y que, por tanto, nunca han atacado a sus compañeros de vida. Existen muchos ejemplos de ello. Desde felinos como leones y tigres hasta osos. Ahora bien, ¿por qué los cocodrilos y otros reptiles no tienen esta misma consideración? Históricamente se ha pensado que estos animales no tienen desarrollada esta misma inteligencia emocional. Esto, sin embargo, podría estar a punto de cambiar. Lo vivido con un perro ha dado mucho que hablar en la comunidad investigadora.
Un conjunto de cocodrilos salva a un perro que había caído al agua
Un suceso ocurrido en el río Savitri ha provocado que se hayan realizado estudios para realizar una revisión de la teorías sobre los reptiles. A tenor por la aparición de unas imágenes en la India, podría haber una opinión sesgada sobre el comportamiento de los cocodrilos salvajes. ¿Y si, en realidad, tienen una función cognitiva superior a la que se les ha catalogado? Un perro que se encontraba huyendo de otros perros decidió refugiarse en aguas repletas de este reptil.
Al contrario de lo que parecía pensarse, los cocodrilos se aproximaron, pero con un objetivo distinto al que todos podríamos imaginar. Los ejemplares que participaron en lo ocurrido únicamente empujaban con sus hocicos el cuerpo del animal hasta la orilla. Se estaba ahogando, por lo que lo mantenían a flote hasta un lugar seguro. Lo ocurrido no dejó indiferente a la comunidad centrada en el estudio de los animales. Se trata de un evento que pone en tela de juicio la teoría que se tiene sobre la inteligencia emocional de estos animales.
Tal fue la sorpresa de los investigadores que se decidió realizar un estudio al respecto. El suceso tuvo lugar en el mes de agosto, siendo objeto de publicación en el Journal of Threatened Taxa. Las imágenes tomadas permitieron detectar cómo el comportamiento de hasta tres ejemplares había sido idílico desde el punto de vista de la investigación. Tras la realización de una serie de mediciones y el análisis de las imágenes disponibles, se llegó a la conclusión de que, efectivamente, estos reptiles son más avanzados cognitivamente de lo que se creía en un primer momento.
La vulnerabilidad del animal es lo que pudo detener cualquier posible ataque. La empatía emocional podría ser la causa que habría provocado un comportamiento muy extraño en función de la información que se tenía hasta el momento de estos animales. Es posible que a lo largo de los próximos años se profundice en la materia para corroborar que lo ocurrido no fue por simple casualidad o si, efectivamente, se trató de un caso puramente aislado.