La víctima condujo su auto con la bala en la cabeza en busca de ayuda. Luchó por su vida durante tres días, pero falleció. Anderson Gutiérrez fue detenido como autor material del crimen, y la familia exige su condena máxima, además de solicitar que se investigue la posible participación de otros involucrados.
La familia Crespo Vidal atraviesa un dolor profundo. Ronal fue víctima de una traición cuando un joven, al que consideraba un amigo, le disparó para robarle alrededor de 60 mil dólares. Con una bala en su cabeza, condujo en busca de ayuda, pero tras tres días de lucha falleció en una clínica. Hoy, el clamor en Montero es uno solo: justicia.
Anderson Gutiérrez Sánchez, de 21 años, es el asesino de Ronal Crespo Vidal, un hombre de 44 años dedicado al librecambio en Montero, Santa Cruz. El crimen ocurrió la mañana del sábado 1 de marzo. Tras el ataque, Gutiérrez realizó algunas compras y alquiló un vehículo para escapar. Fue detenido la madrugada del domingo 2 de marzo en Comarapa, cuando intentaba huir hacia Cochabamba. Actualmente, se encuentra bajo detención preventiva en el Centro de Readaptación Productiva (CEPROM) de Montero.
Inicialmente, Gutiérrez fue imputado por robo agravado y tentativa de asesinato. Sin embargo, tras el fallecimiento de la víctima, la Fiscalía recalificó la causa a asesinato, un delito que en Bolivia conlleva 30 años de privación de libertad. Los familiares de Ronal exigen la pena máxima. Aunque desearían que Gutiérrez fuera encarcelado de por vida, reconocen que la pena de 30 años es la máxima sanción en el país.
Además, los familiares piden que continúen las investigaciones. La madre de Anderson, Mary Sánchez J., habría enviado a su hijo una mochila con prendas de vestir, lo que consideran un acto de encubrimiento para evadir la justicia. La mujer también fue puesta ante un juez cautelar, quien determinó su detención domiciliaria, aunque tiene derecho al trabajo. En las últimas horas, el Gobierno Autónomo Municipal de San Pedro en Santa Cruz decidió apartar a Mary Sánchez de su cargo como responsable de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia y Servicios Legales Integrales Municipales (SLIM). Así también, los dolientes no descartan que haya otros involucrados en el crimen. El fiscal de materia, Luis Alberto Lafuente, informó que citarán a otras personas para esclarecer los hechos, aunque Anderson Gutiérrez insiste en que él fue el único autor del asesinato.
La pesadilla para la familia Crespo Vidal comenzó el sábado. Ese día, Ronal salió de su hogar en su vagoneta. Según el comandante de la Policía de Santa Cruz, Rolando Rojas, Anderson lo llamó y lo citó bajo engaños, alegando que necesitaba cambiar bolivianos a dólares. Se encontraron cerca del Cementerio General de Montero. Ronal ya llevaba parte del dinero en una mochila, pero fue a retirar más fondos de una entidad en la plaza. Al llegar a la urbanización Todos Santos 5, el supuesto amigo sacó un arma y disparó, hiriéndolo en la cabeza. Ronal continuó conduciendo en busca de ayuda hasta chocar contra la puerta de un domicilio. Fue auxiliado y llevado a una clínica, donde permaneció hasta el martes en terapia intensiva. No resistió y falleció.
Antes de que se cumplieran 24 horas del crimen, la Policía capturó a Anderson en Comarapa. Primero intentó escapar por vía aérea, pero al no encontrar pasaje, alquiló un vehículo. Según la Policía, llevaba consigo 55.200 dólares y 29.080 bolivianos, montos robados a Ronal. Además, había comprado dos celulares (iPhone) y zapatillas, donde escondió parte del dinero.
Desde su reclusión, Anderson escribió una carta pidiendo disculpas a los familiares y asegurando ser el único autor del crimen, afirmando que su madre es inocente. Sin embargo, las investigaciones determinarán si actuó solo o con ayuda. Mientras tanto, los dolientes solo buscan justicia por el asesinato de su ser querido.
Ronal es recordado como una persona alegre, generosa y con una gran calidad humana, según expresaron los asistentes a su velorio. Las condolencias y los pedidos de justicia se multiplicaron en redes sociales. Desde Pojo, en Cochabamba, también compartieron su dolor, ya que Ronal era devoto de San Miguel de Arcángel, patrono de ese municipio, y solía visitar el pueblo. En Montero, era miembro de la Fraternidad Morenada Central. Familiares y amigos, desde diferentes lugares, hicieron público su clamor de justicia, exigiendo la pena máxima para el autor. Hoy, después de la misa de cuerpo presente en su hogar en la avenida Kennedy, será despedido alrededor de las 11:00 en el Cementerio General de Montero.
