Para Gabriela Alcón, los líderes cruceños ponen de pretexto una supuesta persecución política en su contra, para buscar “evadir sus responsabilidades” por la violencia generada durante el paro cívico de 36 días.
Continúan las repercusiones por los procesos que se abrieron en contra de los líderes cruceños por organizar el paro cívico de 36 días, en el que se registró diferentes hechos violentos.
Para la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, no existe persecución política y acusó a los cívicos, al rector Vicente Cuéllar y al gobernador cruceño, Luis Fernando Camacho, de intentar “evadir sus responsabilidades”.
Indicó que será la justicia la que determinará si los líderes cruceños están involucrados y el grado de participación en los hechos violentos suscitados durante el paro por el Censo.
“Aparte del daño económico, hubo violaciones a derechos humanos, agresiones de un subgobernador a mujeres ayoreas, actos vandálicos, saqueos, quemas de instalaciones de organizaciones sociales, si se presentó denuncias corresponde que haya investigaciones, los daños que se hicieron a Santa Cruz no pueden quedar en la impunidad”, manifestó Alcón
