Una pareja distrae a una vendedora y usa a una niña para robar

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El hecho quedó grabado por las cámaras de seguridad de una librería; las imágenes muestran a un hombre y a una mujer junto a sus dos hijos, a quienes les dicen el momento cuando deben sustraer un celular

Una mujer y un hombre, acompañados de sus hijos menores de edad, aprovecharon para distraer a la vendedora de una librería para robarle un celular con ayuda de uno de los niños. El hecho quedó grabado por las cámaras de seguridad del negocio y las imágenes fueron entregadas a la Policía para que capture a la pareja y eviten que los niños crezcan con malos hábitos.

Ana P., víctima del robo, indicó que se encontraba atendiendo la librería, ubicada en la zona de la Villa Primero de Mayo, cuando se acercó una familia, la mujer le pidió un material e insistió en que le acerque el producto que se encontraba en la parte trasera del negocio.

Cuando la vendedora va en busca del material, la pareja de la mujer, que esperaba en el ingreso de la librería  junto a su hija, hace una señal a la niña para que ingrese y sustraiga el teléfono móvil de la funcionaria.

El hombre le señala a la pequeña el lugar donde estaba el teléfono y ella, disimuladamente, sustrae el celular, se lo entrega al padre y éste lo guarda en su bolsillo.

La niña espera la señal de su padre para ingresar a sustraer el celular.

 

La vendedora se encontraba ocupada atendiendo a la mujer que estaba con el otro niño, por lo que no se percató del robo. La mujer compró el material y luego se marchó junto a su esposo e hijos.

Minutos después, la funcionaria echa de menos su teléfono móvil y al revisar las imágenes de las cámaras de seguridad, se da cuenta de lo ocurrido. El hecho ya es de conocimiento de la Policía, que ahora busca a la pareja.

«Por suerte solo se llevaron el celular, pero la Policía debería hacer algo con ellos para que los niños no sigan aprendiendo las malas mañas», dijo la funcionaria.

 

Recordó que es primera vez que la pareja con sus hijos ingresan a la librería, pero que frecuentemente rondan por la zona de la Villa Primero de Mayo.

«A esos padres deben darle una lección para que no enseñen a delinquir a sus hijos», acotó la víctima.


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