Michelle Bachelet, la jefa de derechos humanos de las Naciones Unidas, ha dicho que no buscará un segundo mandato de cuatro años después de que expire el actual a fines de agosto, lo que pone fin a semanas de especulaciones.
La mujer de 70 años hizo un viaje a China el mes pasado por lo que fue criticada por grupos de derechos humanos y algunos gobiernos occidentales por no hacer lo suficiente para actuar contra los presuntos abusos contra los uigures y otras minorías musulmanas en la región occidental de Xinjiang.
“A medida que mi mandato como alta comisionada llega a su fin, la quincuagésima sesión histórica de este consejo será la última de la que informaré”, dijo durante su discurso de apertura de la sesión de verano del organismo con sede en Ginebra, sin dar una razón.
Algunos diplomáticos dijeron que esperaban que Bachelet, una expresidenta de Chile a quien se considera cercana al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, se quedara.
Guterres, quien elige al jefe de derechos de la ONU, afirmó recientemente su apoyo a Bachelet luego de su viaje de seis días a China, durante el cual habló con el presidente Xi Jinping y otros altos funcionarios.
El tan esperado viaje de Bachelet, el primero en 17 años de un jefe de derechos humanos de la ONU, la llevó a Xinjiang, donde se alega que China detuvo a más de un millón de personas, así como también llevó a cabo la esterilización forzada de mujeres y el trabajo bajo coacción. China niega todas las acusaciones de abuso en Xinjiang y dice que sus acciones en la región fueron una respuesta necesaria al “extremismo”.
En su discurso, Bachelet dijo que su oficina estaba trabajando en una evaluación actualizada de la situación de los derechos humanos en Xinjiang.
“Se compartirá con el gobierno para comentarios fácticos antes de la publicación”, dijo Bachelet sobre su informe, sin dar un cronograma.
Estados Unidos ha calificado las acciones de China en Xinjiang de “genocidio” y “crímenes contra la humanidad”. Argumentó que las condiciones que las autoridades chinas impusieron a la visita de Bachelet no permitieron una evaluación completa e independiente del entorno de derechos.
En su amplio discurso, Bachelet también pidió a Israel que abra una investigación criminal sobre el asesinato de la veterana periodista de Al Jazeera Shireen Abu Akleh el 11 de mayo y que pida cuentas a los perpetradores.
“Según el derecho internacional de los derechos humanos, Israel debe investigar y garantizar la rendición de cuentas adecuada en cada caso de muerte y lesiones graves infligidas por las fuerzas israelíes. El clima de impunidad imperante está alimentando más violencia y violaciones”, dijo.
“Los niveles ahora crónicamente altos de asesinatos y lesiones de palestinos, incluidos niños, a manos de las fuerzas israelíes en el territorio palestino ocupado, han continuado en los primeros seis meses de 2022”.
El cargo de alta comisionada para los derechos humanos generalmente enfrenta una fuerte presión política de países de todo el mundo, y aunque puede ocupar un máximo de dos mandatos, casi todos los predecesores de Bachelet han evitado quedarse más de un mandato.
