El régimen de Kim Jong-un aseguró que los ejercicios militares se ordenaron en respuesta a acciones de «provocación» de la artillería surcoreana cerca de la frontera común.
Corea del Norte realizó en los últimos dos días una prueba de misil balístico, disparó una amplia descarga de artillería y envió aviones de combate cerca de la frontera con Corea del Sur en acciones que elevaron la tensión en la península.
El dirigente norcoreano Kim Jong-un supervisó personalmente las pruebas de misiles balísticos de las últimas semanas, que presentó como ejercicios de despliegue nuclear táctico.
Un portavoz del ejército norcoreano aseguró que los ejercicios militares se ordenaron en respuesta a acciones de «provocación» de la artillería surcoreana cerca de la frontera común.
El Ejército Popular de Corea (EPC) envió así «una severa advertencia a los militares surcoreanos que incitan a la tensión militar en la zona del frente con una acción imprudente», agregó el portavoz, citado por la agencia de noticias estatal norcoreana KCNA.
El Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas surcoreanas indicó por su lado que diez aviones norcoreanos fueron detectados a 25 kilómetros de la línea de demarcación fronteriza a las 22H30 locales del jueves y a las 00H30 del viernes.
Los aparatos norcoreanos cruzaron la «línea de reconocimiento», lo cual llevó a Seúl a enviar a la zona varios aparatos, entre ellos aviones de combate F-35A, de acuerdo con ese informe, citado por Yonhap.
Además, Corea del Norte lanzó durante la noche 170 disparos de artillería frente a las costas este y oeste del país que, según Seúl, vulneraron la «zona de defensa» marítima acordada en 2018.
El Consejo de Seguridad Nacional de Corea del Sur denunció el viernes una serie de «acciones hostiles» durante la noche y advirtió que «estas provocaciones traerán consecuencias».
Seúl también impuso sus primeras sanciones unilaterales en cinco años contra individuos e instituciones norcoreanas.
«Desarrollo interminable»
El jueves, Corea del Norte informó que el miércoles había procedido al lanzamiento de dos misiles de crucero estratégicos de largo alcance.
Los proyectiles recorrieron 2 000 kilómetros sobre el mar y alcanzaron sus blancos, indicó KCNA, agregando que Kim expresó su «gran satisfacción» por la prueba.
Se trata del último lanzamiento en una serie de ensayos de armas que han agravado las tensiones en la península coreana y aumentado el temor de que Pyongyang realice su primer ensayo nuclear desde 2017.
Corea del Norte dijo esta semana que sus recientes pruebas de misiles incluyeron ejercicios «nucleares tácticos» para simular un ataque al Sur.
La prueba del miércoles «significa que el Norte está operando con capacidad nuclear táctica en misiles de crucero, que son más difíciles de detectar por su vuelo a baja altitud», explicó a la AFP Hong Min, del Instituto de Unificación Nacional de Corea.
Tras las pruebas del miércoles, Kim dijo que Corea del Norte debe «ampliar la esfera operativa de las fuerzas nucleares estratégicas».
» Kim Jong-un remarcó que debemos centrar todos los esfuerzos en el desarrollo interminable y acelerado de las fuerzas armadas nacionales de combate nuclear», indicó KCNA.
Para Kim, la obtención de armas nucleares tácticas -más pequeñas y livianas, diseñadas para usar en el campo de batalla- es una prioridad planteada en un congreso del Partido Comunista en enero de 2021.
El país revisó sus leyes nucleares en septiembre para permitir ataques preventivos y Kim declaró que Corea del Norte es una potencia nuclear «irreversible», lo cual cierra la puerta a una negociación sobre su arsenal.
Desde entonces, Seúl, Tokio y Washington han intensificado los ejercicios militares conjuntos, incluyendo el desplazamiento de un portaviones estadounidense de propulsión nuclear que enfureció a Pyongyang, que ve esas maniobras como un ensayo de invasión. (AFP)