La Justicia condenó a 30 años de cárcel, sin derecho a indulto, a Ovidio Robles, el asesino confeso del policía Oliver Mendoza, de 29 años, ocurrido el pasado lunes en la madrugada en el municipio cruceño de La Guardia.
El juicio comenzó cerca de las 9:00 y concluyó pasado mediodía. Robles fue sentenciado por los delitos de asesinato, robo agravado y asociación delictuosa, entre otros delitos. El sujeto accedió someterse a un procedimiento abreviado.
El Juzgado Primero de La Guardia en Santa Cruz también decidirá la situación legal de otros seis implicados.
Robles lideraba una banda criminal que cometió varios crímenes en La Guardia y municipios aledaños. Según la Policía, la banda realizó atracos, robos agravados y violeciones.