“Muchas empresas clandestinas en la elaboración de sus salchichas usan bastante cantidad de harina, por lo que al momento de presionar se queda hundido el producto y esto no es apto (para el consumo) y no debe tener la autorización de Senasag (Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria)”.
Las salchichas a granel, que son identificadas en mal estado, por lo general, están elaboradas con excedente de harina y otros conservantes que provocan algún tipo de afección a la salud; es recomendable verificar, al momento de comprarlas, el color, el olor y la consistencia.
La responsable de Inocuidad, Mayra Morales, dijo: “muchas empresas clandestinas en la elaboración de sus salchichas usan bastante cantidad de harina, por lo que al momento de presionar se queda hundido el producto y esto no es apto para el consumo y no debe tener la autorización de Senasag (Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria)”.
Luego, agregó: “por otra parte, el color también es importante, ya que tiene que tener el color característico (rosado) y no tiene que tener un olor agrio ni putrefacto”.
La servidora pública enfatizó que las “caseritas”, que venden embutidos y otros alimentos, deben cumplir las exigencias de calidad en los productos que venden, en tal razón es que continúan las capacitaciones.
“En esta época es importante reconocer lo que son las salchichas inocuas, si son aptas para el consumo humano, bajo ciertos parámetros. En el caso de productos envasados, primero se tiene que fijar que sean de las marcas permitidas que dimos a conocer; también, que la fecha de vencimiento esté vigente”, afirmó la entrevistada.
El intendente municipal, Wilmer Quisberth, explicó que dos centenas de vendedoras de las zonas Villa Dolores y Pacajes Caluyo, aprendieron a reconocer embutidos en mal estado, con una capacitación de la repartición edil. Dijo que en próximos días replicarán la actividad en otros lugares.
“Nuestro objetivo es capacitar a los comerciantes que se dedican al expendio de embutidos y más, porque estamos en cercanías de San Juan y estamos capacitando a las ‘caseritas’ y puedan brindar un servicio adecuado a la población, para que sepan cómo manipular el producto y cuáles están autorizados”, afirmó Quisberth.
Morales recomendó a los comerciantes usar gorro, guantes y mandil, e instó a mantener las áreas de trabajo limpias.
