Rusia tomará medidas para reequilibrar su sistema de seguridad tras la adhesión de Finlandia a la OTAN, anunció este miércoles el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
«Eso nos obliga a tomar las medidas necesarias para reequilibrar el sistema de seguridad», dijo Peskov en respuesta a una pregunta de la prensa.
Agregó que la respuesta de Rusia no necesariamente será inmediata, puesto que se trata de un proceso que requiere de «cierto tiempo».
«No es algo puntual, es un proceso prolongado en el tiempo», recalcó.
Insistió asimismo en que Moscú «lo hará todo» para garantizar su seguridad.
La víspera Rusia ya advirtió que no dejaría sin respuesta el ingreso de Finlandia en la OTAN, que representa una nueva escalada en las relaciones con la Alianza.
Según el Kremlin, la ampliación de la Alianza Atlántica atenta contra la seguridad y los intereses de Rusia.
Por eso, Moscú tomará las medidas necesarias para garantizar su seguridad en el plano «táctico y estratégico», adelantó ayer Peskov.