El portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, coincidió con la postura de China sobre la guerra y señaló que Estados Unidos no quiere que el conflicto en Ucrania se acabe.
El Kremlin afirmó este martes que la mano «invisible», tal y como dijo China, detrás del conflicto ucraniano, es en realidad Estados Unidos.
«Esa mano no es invisible, es visible. Es la mano de Estados Unidos«, dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria.
Según Peskov, «Washington no quiere que esta guerra se acabe».
«Washington lo hará todo para que la guerra continúe», aseguró.
El ministro chino de Exteriores, Qin Gang, señaló previamente que «hay una mano invisible que está provocando la crisis en Ucrania«.
A la vez, Qin negó que su país haya vendido armas a Rusa y defendió que China ha hecho «un juicio independiente» y «apostado por la paz» en Ucrania.
«¿Qué ha hecho China para ser amenazada o presionada con respecto a esta crisis? No estamos involucrados directamente ni hemos proporcionado armas. Hemos publicado un documento con propuestas para la paz», dijo Qin.
El Kremlin a su vez reiteró que presta gran atención a las consideraciones chinas, pero ahora mismo no hay premisas para que la situación se resuelva de forma pacífica.
Situación en Bajmut
Las autoridades impuestas por Rusia en la región ucraniana de Donetsk afirmaron este martes que las fuerzas rusas tienen el control de cerca la mitad del territorio de la ciudad de Bajmut, epicentro de los combates en el este de Ucrania.
«Nuestra artillería, nuestro equipo y nuestras tropas están dentro. Controlan prácticamente la mitad de Artiomovsk (nombre ruso de Bajmut)», dijo a la televisión rusa Yan Gaguin, asesor del líder interino de Donetsk, Denís Pushilin.
Gaguin aseguró que Bajmut se ha convertido en una «carnicería» para las tropas ucranianas.
Con todo, no descartó intentos de las fuerzas de Ucrania de realizar operaciones ofensivas en la ciudad con el fin de evitar su caída.
Previamente, expertos rusos aseguraban que las fuerzas de Moscú tenían el control de cerca el 40 % del territorio de Bajmut, donde los combates comenzaron hace más de ocho meses.
Por su parte, el jefe del grupo de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin, admitió este lunes que los soldados de Ucrania defenderán la ciudad asediada «hasta el final».
«Pelearán por Artiomovsk hasta el final, eso es evidente», dijo Prigozhin en su cuenta de Telegram.
Agregó asimismo que los combatientes de Wagner también deben hacer su trabajo hasta el final.
