Programa Hombres de Paz: Las terapias para varones violentos tienen efectos positivos

Compartir el artículo:

Los varones con problemas de violencia llegan al centro como parte de los convenios firmados con el Tribunal de Justicia, con la Fiscalía de Distrito y con algunos Slim (Servicios Legales Integrales Municipales).

El psicólogo clínico del centro terapéutico Hombres de Paz de la Fundación Voces Libres, Aldo Zeballos, destacó los resultados conseguidos con las terapias a varones involucrados en problemas de violencia en sus hogares.

Zeballos señaló que la tasa de reincidencia es muy baja en estos casos sobre la tasa de éxitos logrados, lo que demuestra que las terapias funcionan para cambiar las conductas y formas de pensar de los varones.

“Según el reporte que tenemos, no ha habido casos significativos de personas que retornan nuevamente al servicio (de Hombres de Paz) o son nuevamente denunciadas por violencia, entonces la reincidencia es muy baja y de ahí podríamos inferir que el programa de terapia para hombres está teniendo efectos”, dijo el especialista a ANF.

De acuerdo al informe presentado por el Centro Terapéutico, entre el 7 de julio de 2017 y el 7 de diciembre de 2020, un total de 2.156 varones que ejercían violencia recibió terapia psicológica y alternativa para desaprender la violencia, cambiar su forma de pensar y reaccionar.

El especialista indicó que el artículo 31 de la Ley 348 para Garantizar a las mujeres una vida libre de violencia regula la rehabilitación de agresores, pero se trata de personas que no estén implicados en casos graves como violación o feminicidio, para quienes la terapia es distinta y no se aplica en el país.

Zeballos refirió que la Fundación Voces Libres acogió la normativa y por política institucional empezó a trabajar con hombres para prevenir la violencia hacia las mujeres mediante el centro terapéutico.

“Nos hemos planteado como objetivo trabajar con hombres para provocar cambios en ellos, en sus maneras de pensar, de sentir, de actuar, para que ellos puedan resolver problemas de relacionamiento conyugal, de pareja, paterno filial, sin necesidad de recurrir a la violencia porque eso puede conducir a lo peor”, dijo.

Los varones con problemas de violencia llegan al centro como parte de los convenios firmados con el Tribunal de Justicia, con la Fiscalía de Distrito y con algunos Slim (Servicios Legales Integrales Municipales).

“Los hombres que vienen de juzgados son los que han pasado por procesos abreviados, es decir, se han declarado culpables del ejercicio de violencia, pero muchas veces se acogen a medidas sustitutivas cuando la pena no es mayor a los tres años y una de esas medidas es precisamente que asistan a terapia psicológica”, dijo.

Mientras que los varones que llegan por requerimiento fiscal son los que están enmarcados, por ejemplo, en las medidas de protección a la víctima. Otros casos “vienen por problemas de pareja porque algunos ya están avanzando al lado de la violencia y antes de que se judicialice vienen al servicio”.

El centro terapéutico lleva trabajando cinco años con hombres con problemas de violencia, realizando ajustes a su programa para conseguir los mejores resultados.

“Nosotros hacemos un seguimiento social a los que terminan, a la semana del proceso terapéutico, tiene un número de sesiones en los seis meses y podemos llegar hasta el año, pero en ninguna parte se llega a más”, indicó.

Zeballos remarcó que según sus estudios y lo que ha corroborado la fundación “es que durante el proceso terapéutico podemos dar cuenta de los efectos que tiene la terapia en los varones, pero habrá un porcentaje muy bajo en el que probablemente haya hombres a los que como cualquier terapia psicológica, en cualquier tipo de problemática, no hay garantías de que vayan a cambiar necesariamente”.


Compartir el artículo:
Scroll al inicio