Para Huaycho, si así están las cosas eso quiere decir que “se nos está escapando el control del país” y donde el contrabando tiene organizaciones “mucho más fuertes que el Estado”.
El ingreso del contrabando al país continúa de forma intensiva sin que exista la capacidad para un control efectivo de parte de las instituciones estatales, señalaron representantes de los micro y pequeños empresarios. Sectores industriales como el vitivinícola resultan seriamente afectados por este fenómeno que constituye una “epidemia” para la industria nacional, dijo el representante de la Asociación Nacional de Industriales Vitivinícolas (ANIV).
“Un país consumista de lo ilegal no puede crecer, desmotiva el fomento a la creación de pequeñas y medianas empresas y genera demasiado desempleo, y esa es la realidad de país en el que vivimos”, dijo a ANF el presidente de la Confederación Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (Conamype), Félix Huaycho.
El dirigente expresó su crítica al Gobierno y consideró que “no ha habido esa voluntad de luchar verdaderamente en contra del contrabando” y esta situación se expresa en que “la misma población se ha acostumbrado a comprar lo que es barato, lo que entra al país de forma ilegal”.
Fernando Galarza, representante de la Asociación Nacional de Industriales Vitivinícolas (ANIV), señaló que el contrabando es un lastre, es una epidemia que está liquidando a varias pequeñas y medianas empresas del sector y se está expandiendo ya desde hace unos años con una tendencia a ir creciendo en todo el mercado nacional.
Estimó que, en el sector vitivinícola, por cada 10 botellas de vino que se comercializan en Bolivia, entre 4 y 5 son de contrabando y esta cantidad va en aumento. “Para nosotros es el principal factor que está deteriorando y golpeando duramente a toda la industria vitivinícola”, señaló Galarza en entrevista con ANF.
Los dos puntos fronterizos que tiene Tarija con la República Argentina -uno en Bermejo, con Aguas Blancas, y el otro en Yacuiba, con Pocitos- y Potosí, con el mismo país en La Quiaca, constituyen lugares de ingreso de ingentes cantidades de contrabando, “y lamentablemente hay poca o ninguna acción de nuestro gobierno, que por lo visto está más enfocado en otros temas coyunturales como con lo que está ocurriendo en Santa Cruz, mientras que nuestras fronteras están desamparadas”.
“Ya desde hace mucho tiempo ingresa al país sin ningún tipo de control ni restricción mucho producto de contrabando”, remarcó el representante.
Indicó que hace unos días identificaron camiones procedentes de Argentina atiborrados de vino de contrabando “y nadie hace absolutamente nada, entonces para nosotros es el principal factor que nos está golpeando como industria y como sector productivo”.
Foto: Viceministerio de Lucha contra el Contrabando
El presidente de Conamype refirió que algunas ferias locales en las calles están llenas de productos ilícitos como la prendería usada que se llega incluso a vender en shoppings, es decir, “siendo que es un producto que ingresa de manera ilegal al país se ha normalizado”.
Galarza agregó que en regiones de Cochabamba se realizan ferias del contrabando, ahora en particular de productos argentinos que ingresan en grandes cantidades al país incentivados por la devaluación del peso y los frágiles controles en Bolivia.
El viceministro de Lucha contra el Contrabando, general Daniel Vargas, dijo en una anterior entrevista con ANF que el contrabando llegó hasta los principales centros comerciales de las principales ciudades capitales con presencia en muchos rubros, lo que pone en evidencia que existen grupos muy sofisticados dedicados a este ilícito.
Para Huaycho, si así están las cosas eso quiere decir que “se nos está escapando el control del país” y donde el contrabando tiene organizaciones “mucho más fuertes que el Estado”.
“Para el gobierno éste debería ser un problema muy serio, así como para las gobernaciones y para los municipios”, enfatizó el dirigente y dijo que en los municipios tampoco hay un control debido a que no saben a quiénes otorgan autorizaciones para la venta en las calles o en tiendas.
Indicó que existe un vacío legal en el nivel municipal cuando los productos de contrabando cruzan la frontera y llegan a los mercados, en ese sentido refirió que se trabajará una Ley Competencial que incluya en los gobiernos locales la participación del Viceministerio de Lucha contra el Contrabando para que pueda intervenir en ese nivel y no solo en las fronteras.
El representante de ANIV consideró que los planes del Gobierno contra el contrabando van quedando solo en anuncios debido a que en la realidad el flujo de mercancía ilegal por la frontera sur continúa, y que el Plan del Sur “es más un eslogan promocional que una verdadera lucha contra el contrabando”.
“Parecía un plan ambicioso, obviamente ahí el cuestionamiento fue si existen los recursos económicos materiales y personal para poder implementar este plan, ellos manifestaron que inmediatamente iban a implementar el Plan del Sur, pero en la realidad uno ve que nuestros mercados y tiendas, absolutamente todo, siguen abarrotados de contrabando”, enfatizó.
Reconoció que efectivamente existen decomisos de mercancías, pero aclaró que son esporádicos y que solo es “la punta del Iceber nada más y debajo de eso hay un mundo enorme de contrabando”.
Para el empresario vitivinícola se trata de “grandes organizaciones similares a la mafia que ya nadie los puede parar”.
El pasado lunes, la Aduana Nacional decomisó cinco camiones que pretendían introducir más de 110 toneladas de sésamo, maíz pisingallo, harina, aceite y cerveza sin certificación o con guías vencidas del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag). La mercancía proveniente de Argentina tenía como destino final las ciudades de Potosí y Cochabamba.
Foto: Diario El Gran Chaco
