Un grupo de expertos cree que los fármacos que salvan vidas pueden existir a partir de los hongos, organismos que se han adaptado y evolucionado con el tiempo y, por ello, han conseguido sobrevivir.
“Pensemos en los grandes fármacos que salvan vidas. El más importante de todos, la penicilina, que ha cambiado la historia de la humanidad, es un hongo. Es un mundo inmenso por descubrir (…). Así lo indicó Catalina Fernández, micóloga y bióloga.
De acuerdo con la integrante de un programa de doctorado en investigación clínica, específicamente en oncología, en la Universidad de Santiago de Compostela, “(…) los hongos llevan ahí desde la época de los dinosaurios y han sido capaces de adaptarse. Eso justo es lo que nos ofrecen, la capacidad de adaptación”.
Proyecto abarca los hogos
La investigación emana del “proyecto biotecnológico pionero nacido en Galicia, España, que se ha convertido en la biotech internacional líder en el desarrollo de productos naturales destinados a la salud humana basados en hongos medicinales”, conocido como Hifas da Terra y fundado por Fernández en 1998.
Surgió de una idea en la universidad. “Quería que fuese una empresa innovadora con una clara base biotecnológica. Y, sobre todo, que aportase beneficios a la sociedad. Su desarrollo ha ido ligado siempre al respeto por los organismos, por los hongos que estamos tratando, la ciencia, el paciente, la persona que va a recibir ese producto”, detalló.
“Cuando empezamos con Hifas lo primero que nos decía todo el mundo es que los hongos no eran más que fibra y agua, o bien nos preguntaban que si eran hongos alucinógenos (en Galicia, España, lo llamaban pan de meigas o pan de cobra). Durante todo este tiempo hemos impartido formación sobre la materia hasta el punto de que hemos cambiado la forma en que la gente la percibe”.
¿Pueden ayudar ante pandemias?
Declaró: “Es importante que la humanidad esté fuerte. Los humanos tenemos un sistema inmunológico que es un arma cuasi perfecta y producto de la evolución durante miles de años. Somos los grandes supervivientes, que todos los demás se han ido quedando, entonces los que estamos ahora en el mundo somos los seleccionados. ¿Y eso gracias a qué? A un sistema inmunológico valiente que se adapta” y nos cuida.
Se preguntó: “Entonces, ¿qué hacen los hongos para ayudar a la humanidad ante una pandemia? Ayudan a tener el sistema inmunológico perfectamente afinado y orquestado para que cuando tenga que dar una respuesta sea rápido y efectivo”.
Indicó que resulta la diferencia entre la enfermedad y la salud. “Todos los días nos entran virus y bacterias por la boca, por la respiración, heridas… Si cuando entran nuestro sistema de reconocimiento las identifica y desarrolla un sistema orquestado y bien adaptado de defensa, en ese pequeño lapso podemos tener pequeños síntomas, pero nuestro sistema actúa como un sistema de homeostasis”. Esto significa que se encuentra bien y protege.