DEMANDAN SU CIERRE
El hecho ocurrió luego de una intervención que hizo la Policía y la Intendencia de la Alcaldía al inmueble ante denuncias que ese local funcionaba cerca de las unidades educativas frente a la plaza Juana Azurduy de Padilla del mismo barrio.
Los padres de familia exigían el cierre definitivo del negocio debido a que ocasionaba en los estudiantes un peligro por los hechos delincuenciales que ocurrían, además del consumo de bebidas alcohólicas y microtráfico de drogas.
De hecho, hubo versiones que hasta en ese local se buscaba que las escolares sean inducidas a la prostitución.
Quema de los muebles de un lenocinio en El Alto. Foto: captura video