La Gobernación oficializó ayer una alianza para la protección de la paraba frente roja, única de los valles secos y en “peligro de extinción”.
En el país existen poco más de un millar y cerca del 40 por ciento se concentra en Cochabamba, según el director de la Asociación Civil Armonía Rodrigo Soria.
Esta especie sólo vive en Bolivia, principalmente en comunidades de los valles secos interandinos, es decir, en el sur del departamento en los municipios de Aiquile, Omereque, Pasorapa y Mizque. Además, en partes de Santa Cruz, Chuquisaca y Potosí.
Hasta 2016, la especie se encontraba en la categoría de “peligro” de conservación, pero en la actualidad se posiciona en “peligro crítico de extinción”.
Soria contó que el plan se gestó en 2015 con una serie de trabajos de campo. Los primeros estudios culminaron con un taller realizado también con la Gobernación y el Viceministerio de Medio Ambiente.
Los resultados finales se retrasaron por los problemas sociales de 2019 y la pandemia. Ayer se hizo público el documento y contempla un plan que podría ser aplicado hasta 2032 con programas de información y educación, de desarrollo sostenible, apoyo en las áreas protegidas nacionales y subnacionales y manejo adecuado de la población en cautiverio.
“Proteger no significa prohibir, sino manejar de manera adecuada y sosteniblemente”, sostuvo.