El niño de cuatro años que sufrió la picadura de un alacrán no resistió a las complicaciones por el ataque y falleció este lunes, pese a recibir una dosis del antídoto que llegó de Brasil.
Una cardiopatía congénita complicó el estado de salud del menor de edad, que ingresó el fin de semana a terapia intensiva del hospital del Niño por la picadura.
La mañana de este lunes el informe médico señalaba que el niño se encontraba estable, pese a haber sufrido dos paros cardiorrespiratorios de los que fue reanimado durante su estadía en el hospital.
En esta jornada también recibió la primera dosis del antídoto que llegó de Brasil. Su deceso ocurrió dos horas después de la medicación, reporta Unitel.
“Le estaban poniendo los medicamentos y le agarró el tercer paro”, indicó el tío del niño a los periodistas, en puertas del hospital. Contó que pese a las labores de reanimación, no pudieron salvarle.
Su abuelo lamentó que el antídoto para la picadura de alacrán no exista en Bolivia y hayan esperado desde el sábado –cuando fue internado su nieto– para su aplicación. Además, cuestionó que haya sido enviado de Brasil por tierra y no vía aérea para agilizar la recuperación del niño.