Los taxis autónomos ya circulan por las calles de algunas ciudades norteamericanas. Pero se han producido accidentes y llamadas inútiles a las fuerzas del orden.
Los robotaxis de GM Cruise y Waymo han provocado varios incidentes con la policía y los bomberos de San Francisco, que han pedido por carta a las autoridades que los retiren de la circulación.
San Francisco es la sede de muchas compañías tecnológicas, así que la ciudad californiana ha sido una de las primeras en aprobar el uso de taxis autónomos sin conductor, o robotaxis.
Mediante una app, cualquier ciudadano puede pedir un taxi autónomo a la compañía Cruise de GM, o Waymo de Alphabet (Google).
La experiencia parece haber ido bien en el tema de accidentes de circulación, ya que no ha ocurrido ninguno, pero si han provocado enormes molestias y peligros a la policía y los bomberos de San Francisco
Los robotaxis, las siestas y las mangueras
Según cuenta Wired, la Agencia de Transportes de San Francisco ha enviado una carta a la Comisión de Empresas Públicas de California para que retire de la circulación a los robotaxis, porque piensa que aún no están preparados para operar.
La carta cita varios incidentes ocurridos durante el mes de diciembre, que han puesto en peligro la vida de varios bomberos, y han causado gastos injustificados a los ciudadanos.
En primer lugar, la policía recibió en diciembre tres avisos de Cruise para acudir a revisar un taxi autónomo en donde el pasajero no daba señales de vida. Cuando llegaron al coche, descubrieron que todos ellos estaban… echándose la siesta.
Todos los coches autónomos de Cruise tienen un altavoz para comunicarse con los pasajeros, pero a pesar de llamarles repetidas veces, ninguno de los ocupantes en los tres incidentes, reaccionó al aviso. O los altavoces de Cruise son poco potentes, o lo que necesitan es instalar un despertador o una sirena en los coches…
«Los recursos de respuesta a emergencias pagados por los contribuyentes que se utilizan para casos que no son emergencias perjudican a los ciudadanos en verdadera necesidad», afirma la carta.