Los campesinos de los distritos rurales de El Alto, agradecen a la Pachamama por las lluvias que han empezado a caer. “Es una bendición”, dicen los comunarios y afirman que la sequía estaba acabando con toda la agricultura y la ganadería.
“Ya no había forraje para el ganado, no había agua para los cultivos, los ríos estaban secos. Tal vez nadie sabe, pero nosotros hemos hecho un gran trabajo para ir a visitar al nevado de Chacaltaya y al Huayna Potosí donde hemos hecho wa’jtas para pedir a la Pachamama lluvia y gracias a los achachilas ya está lloviendo”, afirmó el secretario ejecutivo de Federación Única de Comunidades Agrarias de Radio Urbano y Sub Urbano (Fesucarusu), Cirilo Gonzales.
Contó que la dirigencia campesina de los cuatro distritos rurales de El Alto, visitaron los tres lagos que están sobre los nevados: Uno de lluvia, otro de granizo y el último de nieve, en los cuales realizaron las ofrendas para que los caudales de los ríos vuelvan a crecer.
“Había habido tres lagos que hemos visitado para pedir ayuda a los achachilas. Un lago era de lluvia, otro es de granizo que estaba congelado y el otro se alimentaba del agua de la nevada. Hemos pedido ayuda a la Pachamama para que termine la sequía”, explicó.
Según sus explicaciones, los maestros y sabios andinos hicieron un trabajo especial pidiendo pedido permiso para usar la lluvia de los lagos en las comunidades rurales.
Gonzales recordó que los campesinos estaban desesperados luego de cuatro meses de sequía que provocó la pérdida de cosechas, ganado y hasta los propios habitantes ya no tenían agua para tomar. Para el sector, el regreso de las lluvias fue una verdadera bendición de la Pachamama.
“La Pachamama nos ha bendecido, ya está empezando a llover en los cuatro distritos rurales de El Alto. Precisamente nosotros como campesinos estábamos desesperados. La papa estaba seca, las cosechas se perdieron, el ganado moría, no había agua ni para tomar. Ahora nos estamos recuperando de a poco”, afirmó.
COOPERACIÓN
El dirigente de Fesucarusu, Cirilo Gonzales, también agradeció la cooperación que les brindó el Gobierno Autónomo Municipal de El Alto, que les ayudó con carros cisternas para llevar agua a las familias afectadas por la sequía.
“La Alcaldía de El Alto, nos ha ayudado mucho. Nos han mandado agua en cisternas para los distritos rurales de El Alto y para las familias afectadas. Eso nos ha ayudado a recuperar cosechas, para el ganado y para las propias familias. Agradecemos a la hermana alcaldesa, Eva Copa, por nunca abandonarnos y ayudarnos siempre”, resaltó.
Finalmente, pidió a la población no hacer daño a la naturaleza porque de eso depende el futuro de la humanidad y los alimentos que se producen en las comunidades.