Nancy Villarroel desapareció en julio de 2019 de su casa en Santa Cruz. Desde entonces, su cuerpo no ha sido hallado.
El Tribunal Supremo de Justicia en Sucre ratificó, este lunes, la sentencia de 30 años de prisión sin derecho a indulto en contra de Alejandro Torrico, principal acusado del feminicidio de su esposa Nancy Villarroel en 2019. El cuerpo de la víctima no ha sido hallado hasta la fecha.
Tras el fallo emitido, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) llevó a cabo la captura del individuo y su posterior traslado a dependencias del penal de Palmasola.
El director de Régimen Penitenciario, Mauricio Ordoñez, informó que “se ha efectivizado el cumplimiento de la condena por el delito de feminicidio, la cual será de cumplimiento obligatorio en el penal de Palmasola”. Esto significa que Torrico deberá cumplir su sentencia en prisión, poniendo fin a su anterior situación de detención domiciliaria.
¿Qué pasó el 9 de julio del 2019?
Nancy Villarroel era oriunda de Cochabamba, pero llevaba radicando unos 25 años en Santa Cruz. Su hija la vio por última vez la mañana del 9 julio del 2019, día de paro cívico en la capital cruceña. Ese día, ella debía participar de una marcha, sin embargo, según las imágenes de las cámaras de seguridad no salió de su hogar ubicado en el barrio Las Palmas desde el día anterior.
Ese día trágico, sus hijos recibieron mensajes desde el celular de su madre, donde decía que saldría de viaje con sus amigas, sin embargo, la mujer no se había llevado su pasaporte ni documentos personales y, esa situación, despertó sospechas sobre Alejandro Torrico G. También dudaban de que los textos hayan sido escritos por su mamá porque varias palabras estaban abreviadas y ella no solía escribir de esa manera.
El 16 de julio de ese año, Alejandro Torrico (hijo), acompañado de su padre y su tía Roxana, reportó la desaparición de su mamá en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC). Dos días después, el joven denunció a su papá como presunto sospechoso de la desaparición de su progenitora.
La mañana del 19 de julio, el hombre fue aprehendido y decidió acogerse a su derecho al silencio, por lo que fue enviado con detención preventiva al penal de Palmasola, donde estuvo por unos 13 meses. Se realizaron pruebas de luminol a su motorizado y se detectaron manchas de sangre, por lo que la mujer fue declarada muerta.