Confiamos en la firma del acuerdo y pedimos al Presidente que se cumpla fielmente el mismo”, indicó la representante de las víctimas Victoria López.
El presidente Luis Arce en el acto en Casa Grande del Pueblo
“El golpe de Estado de 2019 puso un duro golpe para quienes nosotros hemos peleado por vivir en democracia”, sostuvo en el patio principal de la Casa Grande del Pueblo ante víctimas de las dictaduras, familiares de víctimas, representantes, asambleístas nacionales, viceministros, ministros de Estados e invitados.
Arce lamentó que la historia de Bolivia esté llena de golpes de Estado y “por supuesto” muchas víctimas de las dictaduras, recordando que este domingo se recuerdan 51 años de la dictadura militar de Hugo Banzer Suárez.
“Han pasado muchos años de esos golpes militares que se llevaron muchas vidas de nuestros compañeros, compañeros (…) ya nunca más los volvimos a ver, nunca más sentimos esa mano, esa palabra que nos alentó en momentos de lucha. Fueron compañeros que lamentablemente ya no están con nosotros, pero si van a perdurar en la memoria y hoy en homenaje a todas esas víctimas hemos querido suscribir este convenio para resolver este problema que esta por más de 10 años”, indicó.
El acuerdo nacional establece la reparación integral de víctimas de las dictaduras en el periodo comprendido entre 1964 y 1982, a través de un resarcimiento especial.
Victoria López, representante de las víctimas, rememoró que a partir de la recuperación de la democracia se abocó al reconocimiento al sacrificio y lucha de los luchadores por la democracia, siendo una prueba de ello la instalación de carpas y casetas en el paseo de El Prado en La Paz.
“Ahora, un año y más, logramos este acuerdo que hoy estamos firmando. Se aprobó, con una nueva ley, el pago del 80% para 1.714 compañeros, el resto de los compañeros quedamos que a través de una ley se hará la revisión de expedientes para la calificación. Existe el compromiso para una política de reparación integral y esta pendiente la presentación de los compañeros que no han podido presentar su documentación”.
López dijo que se asumió la decisión de recoger las carpas y casetas de El Prado que por más de 10 años fueron una trinchera de lucha.
“Confiamos en la firma del acuerdo y pedimos al Presidente que se cumpla fielmente el mismo”, indicó.
Precisamente, en ese lugar estaba instalada una carpa donde las víctimas de la dictadura realizaban una vigilia permanente. En virtud del acuerdo, los afiliados decidieron levantarla luego de permanecer ahí por más de diez años y sufrir, al menos, tres atentados.