El Gobierno nacional asegura que el abastecimiento de harina de trigo está garantizado hasta la gestión 2023, para el sector panificador y la producción del pan de batalla a precio justo, afirmó este domingo el ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Néstor Huanca.
El ministro explicó que está vigente un convenio entre la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) y la Confederación Nacional de Panificadores Artesanos de Bolivia (Conapaabol) que garantiza el abastecimiento de pan de batalla a precio justo en los departamentos de Cochabamba, La Paz, El Alto, Potosí y Chuquisaca. En el caso de La Paz, el costo de la unidad del producto es de 0,50 centavos de boliviano
La autoridad de Estado ratificó que en 2021 se acopió 121.000 toneladas del grano de trigo lo que permitió producir 1,7 millones de quintales de harina.
“La demanda del sector panificador es 1,6 millones de quintales, por tanto, el abastecimiento de harina para el sector panificador que tiene convenio con Emapa está garantizada para la gestión 2022”, explicó Huanca.
A esto se suma que, para la gestión 2022 Emapa tiene previsto acopiar 1.577 toneladas de trigo.
“En el oriente, básicamente Santa Cruz, vamos a acopiar 126.800 toneladas de trigo y en Chuquisaca, Cochabamba, Potosí y La Paz alrededor de 19.700 toneladas; por lo tanto, con las más de 146.000 toneladas de trigo que vamos a acopiar en la presente gestión, Emapa procesará dos millones de quintales de harina”, sostuvo el ministro.
Huanca aclaró también que el sector panificador de Santa Cruz nunca solicitó el abastecimiento de harina de Emapa, hasta ahora.
“Evidentemente, hemos escuchado recientemente la preocupación de un sector de Santa Cruz por la posibilidad de subir el precio del pan; por lo que, hemos tomado contacto con la dirigencia y ahora se trabaja para identificar cuál es el pan de mayor consumo en esta ciudad”, explicó.
Huanca recordó que la harina que entrega Emapa es subvencionada para garantizar el precio justo del pan de batalla y su provisión está sujeta a un sistema de control y compromiso social.
En la actualidad Emapa y los panificadores de Santa Cruz sostienen reuniones técnicas para verificar los costos de producción.
“Se visitaron hornos para identificar los costos de producción del pan, Emapa tiene un parámetro de costo-producción para el pan de batalla y queremos identificar costos. Paralelamente, los productores gestionarán la afiliación a la Confederación (de panificadores)”, dijo.
La autoridad de Estado advirtió que las amas de casa no deben dejarse sorprender por un incremento de precios. Asimismo, convocó a los gobiernos subnacionales a cumplir con su función de controlar la comercialización del pan de batalla a precio justo.