El expresidente denuncia un «plan negro» impulsado por Hugo Moldiz, Edmundo Novillo y el comandante Juan José Zúñiga. También recordó la figura de Maximiliano Dávila a quien «presionan» para que inculpe a Morales
La pelea al interior del Movimiento Al Socialismo (MAS) no descansa ni en navidad. Evo Morales, en su programa dominical de radio, apuntó con nombres específicos a los responsables de «un plan negro» en su contra. Incluso recuperó la figura del exdirector de la Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotráfico, Maximiliano Dávila, para dimensionar la trama que están estructurando en su contra.
En esta oportunidad, Morales compartió el programa con el senador Leonardo Loza, un acérrimo defensor del expresidente. En el intercambio de comentarios fueron desgranando un «plan negro» orquestado desde la Casa del Pueblo para impedir la postulación del líder cocalero.
«El Gobierno tiene la misión de proscribir la sigla del MAS-IPSP», denunció Loza durante su conversación radial. Morales complementó la idea al recordar «el plan era destrozar al MAS, atomizar al MAS» que inició en la gestión de Jeanine Áñez. Una estrategia que, a decir del propio Morales, sigue vigente con la gestión de Luis Arce.
Como parte del plan, tanto Arce como el vicepresidente David Choquehuanca trasladarán la responsabilidad a Morales por la posible pérdida de las siglas electorales. Durante casi 50 minutos, Morales y Loza fueron recordando diversas situaciones que ponen de evidencia este plan. «La segunda acción (de este plan) es inhabilitar a Evo», confiesa el mismo Morales.
El «plan negro» está orquestado, según denunció el propio Morales, por Hugo Moldiz, Edmundo Novillo y el comandante (Juan José) Zúñiga. Tras mencionar estos nombres, Loza complementó la idea al considerar que «no van a cesar hasta vernos involucrados en temas de narcotráfico o nos van a cargar (en jerga militar matar)».
Como es habitual en Morales, refirió a personas confiables de la propia policía como su fuente de información. Entre las confidencias que recibió, el expresidente se enfocó en la figura de Maximiliano Dávila.