Del Castillo agradeció el miércoles a sus seguidores y publicó una larga lista de organizaciones y asambleístas que lo estarían respaldando.
El expresidente y líder del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, afirmó que la censura es “vinculante, obligatoria y de inexcusable cumplimiento”, mientras que el futuro del ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, que fue censurado con el voto de legisladores opositores y evistas, continúa siendo una incógnita.
“A diferencia de la CPE de la república neoliberal y excluyente, la actual Constitución aprobada en referéndum modifica la institución jurídica de la censura, fortaleciendo la potestad fiscalizadora de la Asamblea Legislativa Plurinacional, por lo que ésta adquiere carácter vinculante, obligatoria y de inexcusable cumplimiento”, expresó Morales en su cuenta de Twitter al finalizar la tarde del miércoles.
Morales hizo esa afirmación al referirse a un periodista que, según su versión, “de manera mal intencionada, con mala fe y absoluta falta de ética, pretende confundir al pueblo boliviano, señalando que durante su primera gestión gubernamental ratificó a dos ministros censurados por el entonces Congreso Nacional, pero “sin aclarar que en ese entonces estaba vigente la Constitución de 1967, modificada parcialmente en 1991 y 2004, cuando la censura era una sanción moral que tenía carácter de reprobación política”.
Entretanto, hay algunos sectores de los arcistas que apuestan por la ratificación del ministro Del Castillo en su cargo, apelando a una sentencia constitucional, y otros consideran que debe ser destituido de manera inmediata.
En el mismo sentido, el expresidente y líder de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, felicitó el miércoles a su bancada por promover y lograr la censura del Ministro de Gobierno “por su ineficiencia, poca transparencia y rol nefasto en la persecución a la oposición democrática”, y señaló que el presidente Luis Arce “debe cumplir el mandato constitucional de excluirlo del Gabinete sin demoras”.
Por su parte, el gobernador de Santa Cruz y líder de Creemos, Luis Fernando Camacho, indicó que, en lo moral, “esta censura también es para Luis Arce” y que el Presidente “debe demostrarle al país que no es cómplice de Del Castillo”.
“El pueblo boliviano espera que actúe como en cualquier democracia y destituya al ministro censurado”, añadió Camacho.
Durante la tarde del miércoles, la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, dijo: “Existe la normativa, existe nuestra Constitución, ahí está la sentencia del Tribunal Constitucional y se está haciendo una evaluación por parte del presidente Luis Arce y ya tocará pronunciarnos al respecto; mientras, seguimos haciendo nuestro trabajo”.
Mientras, Del Castillo, que todavía no apareció ante los medios de comunicación desde su censura del martes pasado, agradeció “profundamente” por redes sociales por “el apoyo recibido por tantas y tantas organizaciones sociales del país, los verdaderos dueños de nuestro proceso de cambio”.
Luego Del Castillo publicó una lista de decenas de organizaciones sociales y de legisladores que lo estarían respaldando.
La Ley 1350 señala en su artículo 3, parágrafo II, que “resuelta la censura, la presidenta o el presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, en un plazo máximo de veinticuatro (24) horas de haber tomado conocimiento formal, deberá destituir a la o el ministro censurado”.
En el artículo 158 de la actual Constitución Política del Estado se establece que “la censura implicará la destitución de la Ministra o del Ministro”.