Estas son las diferencias entre las redes 2G, 3G, 4G y 5G

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Orange ha anunciado recientemente que muy pronto tendrá disponible la primera red de conexión 5G ‘real’ comercial en España. Son muchos los fabricantes que presumen de tener este tipo de tecnología en sus smartphones para sumarles valor, pero, en que consiste la cobertura 5G y en qué se diferencia del resto de generaciones que había antes, como la conexión 2G, 3G o 4G.

El 2G

Su origen se remonta a la década de los 90 y fue la primera conexión digital de los teléfonos móviles y está prácticamente en desuso. El 2G tiene una velocidad de Internet muy baja y solo está operativa en zonas muy remotas, como entornos rurales y montañas, que están lejos de las antenas.

Gracias a esta tecnología, los usuarios pudieron integrar en un mismo ancho de banda distintos servicios, como los mensajes de texto o el aumento de la capacidad de envío de datos desde fax o módem.

La UE estaría valorando la posibilidad de que las Big Tech paguen parte del despliegue del 5G.

Antes de llegar a la próxima generación, se desplegó la telefonía 2.5G / 2.75G. Con el llamado GPRS, se pudo usar Internet en móviles y enviar SMS y MMS, y la velocidad aumentó con hasta 80 Kbps de bajada y 20 de subida. Con EDGE, la velocidad máxima llegó a 236 Kbps de bajada y 59 de subida.

El 3G

Su expansión comenzó en el año 2000 y llegó a unas velocidades de 384 Kbps de subida y bajada. Esta conexión era más segura que su antecesora, ya que permitía al usuario conocer si una red era la verdadera y no una imitación.

Al principio tuvo fallos de cobertura y precios muy altos en los servicios 3G, pero eso se resolvió. Sus ventajas más destacables eran su transmisión de voz de calidad, que los desarrolladores comparaban con la de las redes fijas, y una mayor velocidad de conexión que evitaba caídas de señal constantes del 2G.

Como pasó con el paso del 2G al 3G, esta última tuvo un proceso de mejora antes de que se pasase a la siguiente generación. Sus novedades estaban sobre todo relacionadas con la velocidad.

El 4G

Esta tecnología llegó en un periodo en el que el smartphone había revolucionado la forma de estar conectados y cada vez más usuarios compraban y utilizaban estos dispositivos. Por ese motivo, el 4G o LTE (Long Term Evolution) eran tan cruciales. Pese a que se haya comenzado a desplegar el 5G hace unos años, sigue siendo la más usada generalmente.

Los requisitos para considerarse red 4G son que las velocidades máximas de transmisión de datos deben estar entre 100 Mbit/s en movilidad alta y 1 Gbit/s en movilidad baja. Además, tiene una mayor velocidad de descarga y permite la visualización de contenido multimedia en streaming sin tantos cortes.

Una de las ventajas es que, en zonas en las que solo se puede conectar al 3G, los dispositivos 4G pueden adaptarse. Sin embargo, tiene defectos, como que su consumo de batería es mayor y el 5G pretende quitarle el puesto con un sistema que combate esto.

El 5G

De momento, el despliegue que se está haciendo del 5G no es totalmente realista, puesto que las operadoras han estado aprovechando antenas 4G ya existentes. Eso hace que las velocidades no sean tan buenas como se prometen, sobre todo en interiores, donde es complicado que las altas frecuencias traspasen las paredes.

Sin embargo, poco a poco esto está cambiando. Por ejemplo, en España, Orange anunció que a finales de febrero estaría disponible una red 5G real en el 90% de las zonas de las ciudades de Sevilla, Valencia, Madrid y Barcelona.

Los grandes beneficios de esta tecnología es que permiten ahorrar batería a la par que mejoran las velocidades de conexión. No obstante, la instalación de nuevas antenas es un proceso que está llevando mucho tiempo y que no es especialmente barato y, mientras tanto, algunas marcas ya están trabajando en la próxima generación de conexión de telefonía móvil.


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