Los delincuentes tenían todo planificado, incluso fueron a una joyería para convencer a la víctima.
La víctima fue interceptada por una persona que le hizo conocer su intención de vender las pepitas de oro. Para terminar de convencerla, le sugirió acompañarla a cualquier joyería para que conozca el valor de lo que ofrecía en venta. Visitaron dos tiendas de este tipo y el estafador entregó una pepita de oro real.
«Para ganar la confianza de la víctima, le mostraron una de las pepitas que era la única real. Fueron a hacer tasar a una joyería, donde les indicaron el peso y que el producto era real. Fueron a una segunda joyería, donde les dijeron lo mismo«, informó el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Ronald Tapia.
La víctima confió, entregó el dinero y recibió las pepitas de oro. Posteriormente, descubrió que eran falsas, eran piedras pintadas de dorado, y ni siquiera le dieron la única pieza que era realmente de oro.
«Aprovechando esto, los delincuentes hicieron que la víctima les lleve a su domicilio y ella retiró 6 mil euros y les entregó. Recibió a cambio de eso, las famosas pepitas en una bolsa. Cuando ella abrió esta bolsa, se trataba de piedras simplemente. Así perdió el dinero«, agregó Tapia.
Ahora, la policía busca a los estafadores.
«A través de las imágenes y la información que la víctima nos proporcionó estamos en búsqueda de estos delincuentes«, complementó el director de la FELCC.