Le encanta la miel y el polen y es capaz de destruir la producción apícola a escala masiva. Se trata del escarabajo de las colmenas (Aethina tumida), un insecto peligroso que ya fue identificado en Bolivia con un hallazgo en Cochabamba, Chuquisaca y Santa Cruz, y que mantiene en alerta a Chile y Argentina.
El escarabajo, de origen africano, puede volar más de 10 kilómetros en busca de colmenas o enjambres. Actúa cavando galerías en los panales, donde fermenta la miel con sus deposiciones y emite un olor que espanta a las abejas.
El ingeniero agrónomo especializado en abejas y presidente de la Federación de Apicultores de Cochabamba (FEDAC), Nabor Héctor Mendizábal, informó que el sector se encuentra “preocupadísimo” debido a que Cochabamba fue el primer departamento en alertar sobre la presencia de este insecto con un brote en una colmena ubicada en la localidad de Machaj Marca, del municipio de Vinto.
Mendizábal alertó que la presencia de este insecto afectaría en la pérdida y destrucción de colmenas e impactará en la producción apícola en los próximos tres años.
Estima que las zonas tropicales sufrirán un gran impacto, cambiará drásticamente el manejo productivo de las colmenas y las salas de cosecha entre algunos. Esto encarecerá la producción de este alimento.
La Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) registró el caso. En Sudamérica, llegó a Brasil, Colombia, Paraguay y ahora a Bolivia. Por ello, Chile y Argentina ya alzaron señales de alerta.
Para prevenir, Chile combate el posible ingreso de este insecto con controles fronterizos, instalando apiarios centinelas en zonas de alto riesgo, potenciando la vigilancia en pasos fronterizos y en medio de una alerta vigente para los apicultores.
