El nuevo ministro de Sanidad italiano, Orazio Schillaci, anunció hoy la eliminación de las sanciones al personal sanitario que no se vacunó durante la pandemia y su reintegración en su puesto de trabajo, y que no se difundirán diariamente como hasta ahora los datos sobre los infectados y fallecidos por la covid-19.
Schillaci, médico, exrector de la universidad romana de Tor Vergata, y uno de los técnocratas elegidos por la líder de Hermanos de Italia, Giorgia Meloni, para su Ejecutivo, decidió que “6 meses después la suspensión del estado de emergencia, y en consideración a la tendencia de los contagios por Covid-19, se considera oportuno iniciar un progresivo retorno a la normalidad en actividades y comportamientos, inspirado en criterios de responsabilidad y cumplimiento de la normativa vigente”, según se lee en una nota.
Por ello, añade la nota, “se suspenderá la publicación diaria del boletín de datos relativos a la propagación de la epidemia, hospitalizaciones y defunciones, que ahora se dará a conocer semanalmente”. Este jueves se registraron 31.760 nuevos casos de covid-19 en 24 horas y 94 muertos.
“Ante la preocupante escasez del personal médico”
Por otra parte, el ministerio de Sanidad anunció la anulación de los expedientes de suspensión de empleo por incumplimiento de la obligación de vacunación, introducida por el anterior ministro, Roberto Speranza, “ante la expiración de las disposiciones vigentes el próximo 31 de diciembre y la preocupante escasez del personal médico”.
Schillaci formó parte del Comité Científico del Instituto Superior de Sanidad, que fue creado para gestionar la pandemia.
El nuevo ministro también ha aprobado la propuesta de Meloni de crear una comisión parlamentaria de investigación sobre Covid.” Es útil aclarar lo que sucedió desde un punto de vista administrativo, porque en términos de los gastos, por ejemplo, es correcto dar una señal a muchas personas enfermas de que el dinero público se gasta correctamente”.
Por el momento, el ministro de Sanidad no ha dado más detalles sobre la campaña de vacunación contra el covid en el país, muy criticada por Liga y Hermanos de Italia, partidos que forman la coalición gubernamental.
La primera ministra italiana criticó las medidas de los anteriores ejecutivos para frenar la pandemia, al asegurar que “se limitaron las libertades fundamentales de las personas y las actividades económicas” y avanzó que su Gobierno no aplicará nunca estos cierres.