No tiene nada que envidiar a las originales. Son zapatillas falsas de reconocidas marcas que salen de China y llegan a Iquique. De ahí, los chinos tienen nexos con bolivianos. Un contenedor de esta mercancía cuesta más de un millón de dólares.
No tiene nada que envidiar a las originales. Son zapatillas falsas de reconocidas marcas que salen de China y llegan a Iquique. De ahí, los chinos tienen nexos con bolivianos. Un contenedor de esta mercancía cuesta más de un millón de dólares.
En un solo contenedor había una carga de un poco más de un millón de dólares. El barco llegó desde China la semana pasada al puerto de Iquique, al norte de Chile, y su destino era Bolivia. Al interior había zapatillas de marcas exclusivas, pero falsificadas. La banda de contrabandistas pretendía llegar a Colchane y luego pasar la frontera a poblador bolivianos. Estos productos son ofertados en redes sociales y también en algunas tiendas.
“Estas zapatillas venían de China e iban de tránsito a Bolivia. No tenemos la certeza si está vinculado con una tienda o con un importador nacional, eso está en investigación. Nosotros nos hacemos parte, primero, por el contrabando y, además, se investiga la fiscalización”, afirmó Alejandra Arriaza, directora nacional de Aduanas de Chile.
El contenedor interceptado llegó desde China a Iquique notificando la importación de cajas con papel higiénico. Al llegar a puerto se revisó con el camión escáner y se detectó que sólo la parte inicial venía con la carga declarada y el resto eran 11.652 zapatillas, 336 poleras y 244 chaquetas deportivas. El valor aduanero fue de $us 1.056.047 y la evasión tributaria de $us 380.000.
“Aduanas está trabajando fuertemente en el desarrollo, a través de la gestión de riesgo, en controlar aquellos ilícitos que se comenten en las fronteras de nuestro país. Uno de esos es el contrabando de mercancías y también los que vulneran las normas de nuestro país relacionados a la seguridad y la salud pública y al comercio lícito”, acotó Arriza.
La Fiscalía de Chile inició la investigación y en primera instancia informó que se trata de imitaciones de alto estándar que pretendían ingresar a los mercados de Chile y Bolivia para engañar a los consumidores. Esa entidad, mediante un informe, reveló que existen bandas de contrabandistas que importan zapatillas de “lujo” desde China y luego introducen estos productos a Bolivia por vías ilegales. En La Paz, la Policía tiene el informe de que estas zapatillas son ofrecidas mediante redes sociales y en algunas tiendas supuestamente legales.
En el informe fiscal se detalla que las mercancías que llegan desde China imitan marcas, modelos y diseños de distintas empresas. Se encontraron desde las demandadas Adidas Bad Bunny a las exclusivas Alexander McQueen, Nike y Dior.
“Son falsificaciones de alto nivel desde el punto de vista visual, pero que no cumplen con ninguno de los requisitos de seguridad o materialidad en su confección”, dice parte del informe.
Investigación en Chile
En Chile indagan a una importadora china que llevaba las zapatillas desde el país asiático al norte chileno. Verifican si esta empresa tiene espacio en la zona franca de Iquique. La investigación inició con el delito de falsificación a la propiedad intelectual.
La Fiscalía, en su informe, exhibe antecedentes de algunos casos similares y las conexiones del “crimen organizado” con Bolivia. Ponen a bandas chinas como las principales de tener nexos con grupos de contrabandistas bolivianos. Los chinos se dedican a importar las zapatillas falsificadas y las entregan en Iquique.
Luego son las mafias bolivianas y chilenas las que siguen con la ruta de las zapatillas falsificadas. Una parte menor de la mercancía se la oferta en suelo chileno. La mayoría pasa a Bolivia.
