Los pronósticos apuntan a que el mercado de platino puede registrar su mayor déficit desde la década de 1970 debido a un aumento de la demanda industrial por parte de China y del sector automotriz, aunada a un declive de la oferta en Sudáfrica.
Se espera que la demanda global de este metal precioso aumente este año un 28 % hasta 8,2 millones de onzas (unas 232 toneladas), según el World Platinum Investment Council (WPIC, por sus siglas en inglés), un organismo perteneciente a la industria.
Sin embargo, la caída de la producción provocada por los problemas de suministro de electricidad que experimenta Sudáfrica, el principal productor de platino, obligó a WPIC a fijar su predicción para su abastecimiento al mercado mundial en 2023 en la cantidad de 983.000 onzas (unas 28 toneladas). “Sería un déficit récord en onzas desde los registros que se remontan a la década de 1970“, manifestó Edward Sterck, director de investigación de WPIC.
Al mismo tiempo, los precios del platino han subido casi una quinta parte desde su mínimo de febrero, situándose en 1.080 dólares la onza, y actualmente se encuentran por encima de su promedio de cinco años de 940 dólares la onza.
WPIC cree que la demanda industrial de platino de este año será la más alta de la historia a causa de las expansiones de plantas químicas y de vidrio en China, y también por la paulatina sustitución del paladio por platino en la fabricación de los catalizadores de automóviles.
Sin embargo, algunos expertos no están de acuerdo con el mencionado pronóstico. Johnson Matthey, un grupo de tecnología de catalizadores que cotiza en Londres, se pronuncia a favor de un crecimiento más suave de la demanda, fijando la cifra en un 20 % este año. De acuerdo con sus datos, el déficit se situaría en 130.000 onzas (3,6 toneladas).
Los expertos señalan que la abundante oferta de los años anteriores ha provocado una acumulación de unos 3,8 millones de onzas, capaces de satisfacer la demanda; no obstante, a medida que se vayan gastando, los precios probablemente aumentarán y se volverán más volátiles. Además, según Sterck, alrededor del 85 % del material se encuentra “cautivo” en China.