España, Chile y EEUU, entre los principales emisores de remesas al país.
Bolivia recibe el 92% de las remesas de 11 países de América y Europa. A junio de este año, los envíos de dinero desde el exterior del país sumaron $us 706 millones, un 2,5% menos que los recibidos en igual lapso de 2022, cuando llegaron a $us 724 millones.
España es el principal país de donde proceden las remesas familiares, con el 30% de los envíos. A este país le siguen Chile (23,8)%, Estados Unidos (20,5)%, Brasil (6,3%), Argentina (4,4%), Perú (2,4%), Italia (2,1%), Suiza (1,4%), Alemania (0,7%), Francia (0,5%) y Paraguay (0,2%).
Entre estos 11 países (cinco de Sudamérica, uno de Norteamérica y cuatro de Europa) suman el 92% del total de las remesas que los migrantes bolivianos envían a sus familias en el país, según el análisis realizado por La Razón con base en la información publicada en la página web del Banco Central de Bolivia (BCB).
REMESAS
Las remesas familiares son enviadas por trabajadores que han migrado a otro país buscando encontrar mejores oportunidades laborales que les generan un mayor nivel de ingreso. El dinero enviado por los migrantes ayuda a mejorar la calidad de vida de los familiares de estas personas, pero además contribuyen al desarrollo económico del país receptor.
Santa Cruz, Cochabamba y La Paz, en ese orden, son las regiones que reciben la mayor cantidad de las remesas que envían los migrantes bolivianos, según los reportes periódicos del BCB.
España es desde hace casi dos décadas el principal país emisor de remesas hacia Bolivia. Los migrantes bolivianos se concentran principalmente en las comunidades autónomas de Cataluña y Madrid, aunque hay importantes comunidades en todo ese país.
Chile se ubica, desde hace tres años, como el segundo país de donde provienen las remesas enviadas por los connacionales. La Razón publicó el 19 de marzo que, en los últimos años, el flujo de dinero enviado por los migrantes bolivianos a sus familiares desde Chile ha crecido exponencialmente. En 2013, las remesas procedentes de ese país apenas representaban el 6,1% del total y, actualmente, ya llegan al 21,6%. Entre 2013 y 2022, las remesas procedentes de ese país han pasado de $us 72 millones a $us 310 millones, un crecimiento del 330,5% (más de cuatro veces en 10 años).
Según los datos colectados por las autoridades chilenas, los migrantes bolivianos, mayoritariamente, llegan a laborar a ciudades del norte de ese país como Calama o Iquique, atraídos por las posibilidades de un puesto de trabajo, ya sea en la minería o en el sector servicios que se ha desarrollado a partir del auge minero. También en la zona norte, en Arica y Parinacota, el trabajo agrícola ocupa mucha población boliviana.