El 51% de los ahorros de los bolivianos están en DPF’s

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Según la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), a la fecha, al menos el 51% de los ahorros están en Depósitos a Plazo Fijo (DPF), lo cual refleja la confianza de la población en el sistema financiero nacional.

“El sistema financiero hoy sigue mostrando ribetes de mucha fortaleza, solvencia, estabilidad y confiabilidad en un ambiente muy desafiante como el que tenemos”, destacó este martes el director ejecutivo de la ASFI, Reynaldo Yujra, en contacto con el canal estatal.

Explicó que quienes quieren depositar sus dineros en un banco tienen tres posibilidades: en cuenta corriente (utilizado más por empresas para el manejo de cheques), caja de ahorro (usadas con tarjetas de débito en cajeros) y DPF.

Yujra dijo que el DPF es uno de los indicadores que más llama la atención a nivel de ahorros. En esta modalidad, el dinero se inmoviliza durante un cierto tiempo; es decir que, si una persona deposita sus recursos a seis meses de plazo, en ese tiempo no lo puede utilizar.

Este tipo de depósito le permite al banco programar sus operaciones de crédito de financiamiento a sus prestatarios y al ahorrista tener una tasa de interés “y mientras el plazo sea más largo, la tasa es mayor”.

“Estos depósitos a plazo fijo hoy representan el 51 por ciento del total de ahorros de la población. Entonces hay dos elementos que se desprenden de esto. Por un lado, los bolivianos tienen capacidad de ahorrar, no necesitan de estos recursos que están inmovilizados y sus ingresos de sus actividades de trabajo, sus negocios permiten cubrir las necesidades de gasto; y, por otro lado, la confianza, alguien que deposita más de un año tiene que tener confianza sobre la economía y el sistema financiero”, relievó.

Los DPF están en un promedio cercano a tres años, lo cual “refleja la buena confianza que tiene la población sobre el sistema financiero”, respecto a años pasados cuando no era de igual manera.

“En la década de los 90 y principios del 2000, los índices eran por supuesto inferiores, el plazo promedio no se acercaba si quiera a un año, los depósitos eran muy volátiles y por eso los créditos también eran de corto plazo”, recordó.

Destacó que a raíz de que los ahorristas confían en el sistema financiero, ahora se puede acceder a créditos de 25 hasta 30 años plazo, respecto a los 10 a 15 años, “quizá en el mejor de los casos”, que antes se otorgaba.

“Hoy tenemos un periodo prolongado porque hay una permanencia de estos recursos”, insistió.


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