La nueva presidenta de Perú, la primera mujer que ocupa el cargo en el país, ha hecho un llamamiento a las fuerzas políticas a una tregua y se ha comrpometido a luchar «por los nadies»
El presidente había disuelto el Congreso, decretado toque de queda y formado un Gobierno de emergencia nacional horas antes de enfrentar la que iba a ser su tercera moción de censura. En lo que rápidamente todas las autoridades del país han considerado un autogolpe, Castillo ha abandonado el Palacio del Gobierno de Lima con sus familiares y finalmente ha sido arrestado.
El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CCFFAA) y la Policía Nacional de Perú (PNP) alertaron por su parte de que no acatarían cualquier acto contrario al orden constitucional.
En una maniobra política completamente inesperada, Castillo había anunciado que convocaría elecciones tras haber declarado el Gobierno de emergencia. El presidente del Tribunal Constitucional (TC) de Perú, Francisco Morales, hizo instantes después un llamado a través del Canal N a las Fuerzas Armadas del país para «restablecer el orden constitucional». Poco después, el Constitucional emitió un comunicado en sus redes sociales en el que declaraba que el presidente había llevado a cabo un «golpe de estado».
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Cientos de manifestantes han salido a las calles de Lima.Con una fuerte presencia policial, decenas de manifestantes se han congregado frente al Congreso en la avenida Abancay con banderas peruanas, pancartas y bocinas para celebrar la destitución de Castillo en una marcha que fue anunciada el martes con el nombre «Toma de Lima».
