Se apagó la vida de Luciana Desiré Vaca. La mujer trans fue apuñalada ocho veces por su pareja en agosto de este año. El daño fue irreversible y quedó en silla de ruedas.
Luciana pedía justicia, pero su agresor prófugo goza de impunidad. No pudo más y decidió quitarse la vida. Sus familiares y amistades la acompañaron ayer hasta su última morada en La Paz.
La joven trans es recordada por sus amistades como una persona alegre, soñadora y decidida. Era modelo y activista por los derechos de la comunidad Lesbiana, Gay, Bisexual, Transgénero e Intersexual (LGBTI).
Los colectivos piden que el exnovio de Luciana sea capturado y encarcelado por su muerte. “Ha sido encontrada sin vida. Nuestra compañera Luciana hace unos meses fue agredida por su pareja y la ha dejado en silla de ruedas, parapléjica. Lamentablemente, ella ha decidido quitarse la vida porque no aguantó más estar en una silla de ruedas”, dijo una de las amistades de Vaca.
Según sus compañeras, la víctima cambió después de haber sido agredida por su expareja, con quien enamoró durante años. Sentía que era una “carga” para las personas que estaban a su alrededor y creía que ya no iba a poder cumplir sus sueños. Para sus amigas, el agresor prófugo ya la había “matado en vida”.
Lo responsabilizan de la muerte de Luciana. “Su propósito era matarla. La apuñaló hace meses ocho veces por la espalda. Le cambió la vida y destruyó sus sueños. Ella era una persona que participaba de distintas actividades”.
Desde los colectivos, piden a la Policía que continúe con la búsqueda del sindicado.
