Un video llegó a la redacción de la red unitel y detalla cómo supuestamente operaba esta mafia paquistaní en el país para importar vehículos “grises” al mercado boliviano. Este grupo está detrás del caso las “ambulancias fantasmas”, según las pesquisas.
Un video llegó a la redacción de la red En él se identifica al supuesto cabecilla de la presunta mafia paquistaní. El clip muestra cómo opera este grupo para internar a Bolivia vehículos “chutos” y “grises” al mercado boliviano.
Umar Siyab, uno de los líderes de esta organización, y su mano derecha ingresaron al radar de la justicia boliviana y ahora podrían ser buscados por la Policía internacional. Ellos son investigados dentro del caso de legitimación de ganancias por la venta de ambulancias a la Gobernación de Potosí, dinero que es del Estado boliviano.
Según los datos de las pesquisas, Muhammad Kashif Ilyas, otro integrante de esta organización, se encarga de recibir a los clientes de negocio de auto venta que se ubica en territorio chileno.
“Puede pedido”, dice uno de los empleados del negocio.
Los precios de los motorizados en este lugar son inferiores a los registrados en Bolivia puesto que los vehículos que se venden son de la “zona gris”; es decir, vehículos reacondicionados, como las ambulancias que fueron compradas por el gobernador de Potosí, Jhonny Mamani, para el servicio de salud. Se habían ofrecido como motorizados nuevos y, por los datos de las investigaciones, no era así.
Una vez superado el primer filtro, se elige el vehículo y luego comienzan los “trámites”. En su escritorio espera Umar Siyab, quien aconseja al “cliente” como evitar el pago de impuestos en Bolivia mediante un procedimiento de “subfacturación” de los vehículos.
“Te voy a dar un número, no te preocupes por eso”, dice el extranjero con seguridad.
Para la Cámara de Automotor Boliviana (CAB), Siyab es parte de una mafia clandestina que ya opera en territorio nacional y que desde hace años ingresan vehículos de este tipo al país.
En Potosí, las patrullas para seguridad ciudadana fueron adquiridas a este grupo. El mismo procedimiento se aplicó para la licitación de las “ambulancias fantasmas”, que derivaron en una investigación por la cual el gobernador Mamani está detenido en la cárcel de San Pedro de la ciudad de La Paz.
En su oficina, Siyab tiene las fotos de los vehículos que hay a la venta. Desde ese escritorio, ofrece contratos por la compra de cuatro camionetas o más y la facilidad de contactar al cliente con un transporte. Así iban a ser trasladadas las 41 ambulancias reacondicionadas que la Gobernación de Potosí compró.
De acuerdo con datos de la CAB, en tres años, esta supuesta mafia pakistaní importó 11 mil vehículos a Bolivia, causando un daño económico millonario al Estado.
“Hay un desfase en la declaración de tributos de aproximadamente 400 millones de bolivianos, eso significaría unos 170 millones de bolivianos en defraudación”, señala.
La noticia de la aprehensión y encarcelamiento del gobernador Mamani hizo que se relacione su nombre con el de Siyab. Un diputado chileno anunció reuniones con sus pares para indagar sobre estas supuestas mafias instaladas en territorio chileno.
El abogado René Villarroel defiende al dueño la empresa que se adjudicó la compra de las “ambulancias fantasmas” y aseguró un familiar cercano de Mamani es el nexo.
¿Cómo llega una empresa pequeña a ganar una licitación y adjudicarse una venta millonaria para la Gobernación de Potosí? Según Villarroel, el trato entre Siyab y Mamani había sido directo, la empresa solo puso el nombre.