Tras accidentes en los que las víctimas quedan sepultadas o se ven obligadas a enfrentar condiciones extremas, surge la duda de cuánto tiempo es posible sobrevivir sin alimentos ni agua. Estas historias de resistencia nos impactan, pero también nos llevan a cuestionar los verdaderos límites del cuerpo humano.
¿Es posible soportar semanas sin ingerir comida ni líquidos? La respuesta no es simple, ya que depende de varios factores; desde el estado físico de la persona hasta el entorno. Veamos, entonces, hasta dónde puede llegar nuestro organismo en circunstancias tan críticas.
¿Cuánto se puede sobrevivir sin comer?
No existe una fórmula precisa para saber cuánto tiempo se puede permanecer vivo sin ingerir alimentos. Por razones éticas, la ciencia no pudo determinarlo con exactitud, ya que no sería viable experimentar con ello.
Sin embargo, hay estudios científicos basados en huelgas de hambre. Los mismos sugieren que, en ausencia de comida, pero con acceso al agua, una persona podría sobrevivir hasta dos meses. La salud general previa, la edad, el sexo y el tamaño corporal influyen en este tiempo.
Un ejemplo famoso fue el de Mahatma Gandhi, quien sobrevivió 21 días sin alimentos sólidos y solo con agua. Por otro lado, está documentado el caso de un monje que intentó ayunar durante 40 días por motivos religiosos, pero se vio obligado a detenerse en el día 36, debido a síntomas graves.
¿Qué le ocurre a tu cuerpo durante los primeros 5 días sin comer?
Cuando el cuerpo se queda sin alimento, en 24 horas comienza a cambiar su forma de generar energía. Pasará de usar la glucosa como combustible, al glucógeno almacenado en el hígado y en los músculos.
Al segundo día de ayuno, con las reservas agotadas, empieza a descomponer los músculos para obtener energía, aunque solo como una solución temporal, ya que el cuerpo prefiere conservar el músculo. En respuesta, entra en un estado llamado cetosis, donde usará las reservas de grasa para producir cetonas, una fuente alternativa de energía.
Además, durante los primeros días sin comer, se pierden de uno a dos kilogramos diarios, pues se suma el efecto de la deshidratación. A continuación, la pérdida se estabiliza en 0,3 kilogramos por jornada.
Mientras más grasa tenga el cuerpo, más tiempo podrá resistir. Una vez agotada la grasa, el organismo recurrirá a la descomposición del músculo, lo que conducirá a consecuencias severas.
Efectos de la falta de comida en el cuerpo
A medida que el organismo se queda sin nutrientes, comienza a fallar. Estas son algunas de las principales consecuencias de privar al cuerpo de alimento:
- La masa muscular se reduce, lo que trae debilidad.
- Baja la temperatura corporal, en un fenómeno conocido como hipotermia.
- El cuerpo empieza a acumular líquido en los brazos, las piernas y el abdomen.
- La producción de ácido estomacal disminuye, lo que genera encogimiento del estómago y diarrea.
- Una consecuencia es la anemia, que afecta la capacidad del cuerpo para transportar oxígeno de manera eficiente.
- Se reduce el tamaño de los ovarios y los testículos, con pérdida del deseo sexual e interrupción de los ciclos menstruales.
- La piel se vuelve más fina, seca y menos elástica, mientras que el cabello se vuelve quebradizo y tiende a caerse fácilmente.
- A nivel pulmonar, la respiración se vuelve lenta y la capacidad de los pulmones se reduce. En fases avanzadas, esto puede conducir a una insuficiencia respiratoria.
- La capacidad del cuerpo para combatir infecciones y reparar heridas se ve comprometida, lo que aumenta la vulnerabilidad a enfermedades y lesiones.
- Las personas pueden volverse apáticas e irritables, con deterioro en la función mental. La falta de concentración y el entumecimiento y hormigueo en pies y manos son comunes.
- El corazón también se ve afectado. Su tamaño se reduce y la cantidad de sangre que puede bombear disminuye de manera considerable. La frecuencia cardiaca se vuelve lenta y la presión arterial baja, lo que puede llevar a la insuficiencia cardíaca.
Si bien la resistencia del cuerpo humano es notable, no es igual para todos. Las personas delgadas, con un índice de masa corporal (IMC) inferior a 18,5, son más vulnerables a la desnutrición. En ellas, un ayuno prolongado puede reducir su esperanza de vida en más de 4 años.
¿Cuánto tiempo puede resistir el cuerpo sin agua?
El agua es esencial para la supervivencia, incluso más que los alimentos, ya que nuestro cuerpo está compuesto por aproximadamente 50 % a 70 % de ella. Según el International Journal of Qualitative Studies on Health and Well-being, una persona con un peso promedio puede sobrevivir solo una semana durante un ayuno seco, es decir, sin ingesta de líquidos.
Factores como el clima, la actividad física o problemas de salud —fiebre, diarrea, vómitos—, aceleran la pérdida de líquidos, agravando la deshidratación. En condiciones de calor extremo, por ejemplo, el cuerpo expulsa más agua a través del sudor. A su vez, si aparece diarrea, como efecto de una inanición concomitante, entonces se acelera el proceso.
Consecuencias de la falta de hidratación
A diferencia de la falta de comida, en la que el cuerpo puede recurrir a sus reservas de grasa y músculo, la ausencia de agua afecta de inmediato funciones vitales como la regulación de la temperatura, la eliminación de desechos y el transporte de nutrientes. Sin una hidratación adecuada, los riñones, el cerebro y el corazón fallan con rapidez.
En etapas iniciales, la falta de agua provoca mareos y una sensación de debilidad extrema. Si la situación empeora, los riñones se volverán insuficientes por falta de líquido para trabajar en su sistema. Por lo tanto, el equilibrio de sodio y potasio en la sangre se verá alterado y una de sus señales serán las contracciones musculares involuntarias.
A la par, los riñones insuficientes no filtran tóxicos a la orina y estos se acumulan en los tejidos del cuerpo. A muy corto plazo, el fallo de múltiples órganos es inevitable.
¿Hasta dónde puede llegar el cuerpo para sobrevivir?
La próxima vez que escuchemos historias de supervivientes en situaciones críticas, deberemos recordar que el cuerpo humano tiene una capacidad impresionante para adaptarse y resistir, pero encuentra barreras. La cantidad de tiempo que una persona puede estar viva sin comer ni beber depende de la edad, la salud previa y el entorno.
No obstante, la ciencia estableció límites aproximados. Mientras que es posible sobrevivir sin comida durante semanas, la falta de agua reduce este tiempo a unos pocos días.
Mantenerse hidratado es crucial para prolongar la vida en condiciones extremas. Sin embargo, es importante recordar que, incluso con líquidos, la inanición lleva al fallo de los órganos vitales y, eventualmente, a la muerte. En última instancia, el acceso al agua es el factor más determinante.