Kim Jong-un hizo este anuncio durante una reunión con funcionarios de salud e investigadores, y ordenó la flexibilización de las medidas de emergencia impuestas para controlar la pandemia.
Corea del Norte declaró la «victoria» en la campaña de emergencia del país contra la COVID-19, un virus que consideran venido de su vecina del sur y que el líder norcoreano, Kim Jong-un, también podría haber pasado con «altas fiebres», según recogieron medios estatales.
El líder norcoreano, Kim Jong-un, afirmó «solemnemente la victoria en la campaña antiepidémica de máxima emergencia para exterminar el nuevo coronavirus«, según recogió la agencia estatal KCNA, tres meses después de que la nación informara de su primer brote de esta enfermedad.
Kim Jong-un hizo este anuncio durante una reunión con funcionarios de salud e investigadores el miércoles y ordenó la flexibilización de las medidas de emergencia impuestas desde un nivel máximo de prevención a un nivel normal.
El líder norcoreano también elogió las contribuciones de los profesionales de la salud para «desactivar con éxito la grave crisis de propagación de la epidemia» y defendió el «sistema social del país, que es el mejor del mundo».
Culpan a Corea del Sur
La hermana del líder, Kim Yo-jong, por su parte, culpó a los panfletos y otros «objetos sucios» procedentes de Corea del Sur de causar el brote del virus en el Norte y propuso medidas duras contra el país vecino.
«El orgulloso éxito de hoy demuestra una vez más que podemos permanecer imperturbables ante cualquier catástrofe y superarla sin falta mientras estemos bajo la sabia dirección del Comité Central del Partido, y muestra más claramente el tremendo poderío de nuestro país», dijo la hermana de Kim.
Kim Yo-jong también apuntó a que su hermano podría haber pasado la enfermedad con «fiebre alta», pero que no pudo descansar «mientras dirigía los esfuerzos antiepidémicos del país».
El pasado 12 de mayo, Pyongyang informó por primera vez de su primer caso de la COVID-19 tras no haber hecho público ningún contagio desde el inicio de la pandemia e impuso cierres en todo el país, aunque no ha informado de más casos sospechosos desde el 29 de julio.
Corea del Norte, que aún no había administrado ni una sola vacuna anticovid hasta mayo, ha rechazado ofertas de ayuda sanitaria, incluyendo vacunas, de Seúl y de Estados Unidos, pero, según la Alianza Global para la Vacunación (GAVI), habría aceptado vacunas de China y empezado ya a administrarlas.