Las políticas asumidas por el gobernador cruceño, que impuso un paro de 36 días, se sintetizan en caos. Tiene obras sin ejecutar en la región.
Los dos años y medio de gestión del gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, se resumen en confrontación, sin ejecución de obras y el pisoteo de la autonomía cruceña, según Amdecruz y el analista Hugo Siles.
Luis Fernando Camacho, quien durante su campaña prometió una “Bolivia federal” y llevó la bandera de la autonomía cruceña, el 9 de marzo de este año promulgó la Ley de Ausencia Temporal, norma que le permite continuar en el cargo en su condición de recluido desde el penal de Chonchocoro, La Paz.
Esta medida vulnera el estatuto autonómico de la región, que establece que es el vicegobernador quien debe asumir el mando. Para el analista Hugo Siles, la acción solo demuestra que el gobernador cayó en una retórica.
“Es una retórica porque ni siquiera él cumple con su estatuto que pisoteó y menos con el federalismo, que es una falta de respeto e innecesaria”, dijo.
En 2021 Camacho, líder de la opositora Creemos, asumió el mando de la Gobernación cruceña. Para diputados, dirigentes sociales y alcaldes, durante este tiempo lo único que demostró es “una mala gestión”. Es más, no existen obras de impacto para Santa Cruz, uno de los departamentos con mayor crecimiento económico que se ve agobiado por “bloqueos y paros políticos”.
Una de esas medidas fueron los 36 días de paro impulsado por Camacho con una pérdida de $us 1.200 millones, recordó el analista.
“Este paro ha llevado a un desastre al departamento, que ahora intenta recuperarse y encima está el problema carretero en el municipio de Buena Vista”, apuntó.
En este sentido, Siles aseguró que la mayor gestión que hizo el exlíder cívico fue un “discurso de confrontación”
“Es una gestión de confrontación, de invisibilización de obras, y la actitud de Camacho no hace más que darle una estocada al desarrollo cruceño”, afirmó.
AMDECRUZ
El vicepresidente de la Asociación de Municipios de Santa Cruz (Amdecruz), Pedro Damián Dorado, calificó la gestión de Camacho como una “estafa”, porque prometió obras y promovió leyes, como el desayuno escolar, pero hasta el momento no se cumplen.
“Siempre se comprometió a firmar convenios, pero Santa Cruz no tiene ni una sola obra que haya impulsado Camacho y menos grandes proyectos, entonces por parte de la Gobernación no tenemos nada que celebrar”, enfatizó.
De acuerdo con Dorado, en la población cruceña existe un descontento generalizado que no es de ahora, sino que viene desde la gestión del exgobernador Rubén Costas, quien prometió otorgar el 100% de regalías para las provincias, pero esas “solo fueron promesas”.
“Además de ser totalitario (Camacho), su gestión es abusiva, porque cuando les da la gana, con el Comité Cívico, llaman a marchas y bloqueos. En realidad, no les interesa el desarrollo cruceño, solo sustentar sus logias”, expresó.
En temas educativos, hasta ahora no aporta para el desayuno escolar, a pesar de que existe una ley de corresponsabilidad entre alcaldías y Gobernación.
En salud hay un descuido en los hospitales de tercer nivel. En vías de integración hasta ahora no existe ni una obra propia de Camacho, detalló. Frente a esta ausencia, la Amdecruz solicitó en varias oportunidades una reunión con la autoridad para atender estos temas, incluso se envió una demanda de las provincias.
La falta de obras se observa en la baja ejecución. En agosto, el Gobierno informó que la Gobernación de Santa Cruz tiene en sus cuentas Bs 467 millones sin ejecutar y pidió invertir ese dinero en obras a favor de la población.
