Cerca de 1.000 armas de fuego y millas de municiones que eran comercializadas de forma irregular en Río de Janeiro fueron descomisadas por agentes de la Policía Federal, información este viernes fuentes oficiales.
Se trata del mayor arsenal incautado por las autoridades en la historia de Río, según un comunicado de la Policía.
Las armas de fuego, entre las cuales hay cinco fusiles, tres ametralladoras tipo UZI, carabinas, revólveres, pistolas y «miles de municiones», estaban siendo comercializadas de forma irregular en dos tiendas, ubicadas en la Baixada Fluminense, un deprimido y violento sector que agrupa varias favelas en la zona metropolitana de Río.
«La incautación de tan importante cantidad de material bélico es de suma importancia para evitar la posible introducción de armas de fuego en el mercado clandestino y ayuda a debilitar organizaciones criminales como milicias o grupos delictivos», señala el comunicado de la Policía.
La acción, que tuvo lugar el miércoles pasado, fue un desdoblamiento de un operativo iniciado el mes anterior contra las dos tiendas, en el cual fueron detenidas cuatro personas e incautados 68 fusiles y 12 revólveres, además de municiones.
Las irregularidades encontradas por las autoridades pueden enmarcarse en los delitos de comercio ilegal de armas de fuego, municiones y accesorios, y posesión ilegal de armas de fuego, con penas de 12 y 3 años, respectivamente.