El capitán de Bomberos Antofagasta en La Paz, Hans Barbolin Limachi, recomendó a la población evitar el uso de juegos pirotécnicos en la fiestas de Año Nuevo, por los riesgos que implican.
A pesar de las prohibiciones y las campañas de concienciación sobre el uso de fuegos artificiales este 31 de diciembre, es inevitable que muchas personas sigan utilizando pirotecnia. Sin embargo, ¿qué consecuencias pueden traer para las mascotas y a los niños con autismo?
“Son estos dispositivos que pueden provocar una reacción explosiva, más aún cuando sabemos que son mal manipulados. Si bien sabemos que su composición es de pólvora, pueden ocasionar lesiones severas más aún a los menores de edad”, explicó, en contacto con Bolivia Tv.
Advirtió que los juegos pirotécnicos, ya sean de alta o mínima intensidad, pueden ocasionar quemaduras de primer grado, al no ser correctamente manipulados y si no se tiene precaución.
Además, las leyes prohíben su venta por el riesgo que representan y si se identifica a los que los comercializan ello no debería ser permitido, señaló.
“Si van a utilizar estos juegos pirotécnicos que sea con supervisión, más si son menores”, insistió.
Mencionó que una de las principales causas de accidentes por uso de juegos pirotécnicos es la mala manipulación, como direccionar incorrectamente, lo cual podría ocasionar un incendio o un accidente a una persona.
Afectación a niños con autismo
El impacto de los fuegos artificiales no solo afecta a las mascotas, sino también a grupos vulnerables como los niños con autismo. La pediatra especialista en el área, Carla Carvajal, menciona que estos niños pueden sufrir daños debido a su hipersensibilidad.
“El problema con los niños autistas, sobre todo, es que los fuegos artificiales pueden causarles daños importantes porque son niños muy sensibles. Los ruidos no solo son molestos para ellos, sino que el constante estallido de varios fuegos artificiales les afecta aún más debido a su hipersensibilidad auditiva”, explica Carvajal.
El autismo, o trastorno del espectro autista (TEA), engloba una amplia gama de condiciones que se caracterizan por dificultades en las habilidades sociales, los comportamientos repetitivos, el habla y la comunicación no verbal.
Además, Carvajal destaca que ciertos grupos de adultos también pueden verse afectados. “Las personas con problemas cardíacos o respiratorios podrían reaccionar negativamente a estos fuertes estruendos. También aquellos con problemas mentales pueden sufrir reacciones adversas”, señala.
Problemas para las mascotas
La responsable del Área de Zoonosis de El Alto, Olga Poma, afirma que los fuegos artificiales pueden afectar de manera considerable la salud de las mascotas, provocando altos niveles de estrés y desorientación.
“Estos fuegos artificiales afectan gravemente la salud de los animales, causándoles estrés y desorientación. Muchas personas no tienen el conocimiento adecuado para cuidar de sus mascotas, lo que puede llevar a situaciones extremas como el animal escapando sin rumbo y perdiéndose o incluso sufriendo accidentes como atropellos”, explica Poma.
La especialista destaca que existen métodos que pueden ayudar a paliar los efectos de estos ruidos en los animales. Una de las recomendaciones es aislar a la mascota en un lugar tranquilo.
“Es importante que el cachorro esté en un ambiente calmado, no dejarlo solo. También hay métodos como colocar una venda en el animal o incluso aplicar musicoterapia para ayudar a calmarlo”, señala. Además, sugiere cerrar puertas y ventanas y, si es posible, colocar una barrera debajo de ellas para evitar que los ruidos lleguen.
Carvajal recalca la importancia de la sensibilización y el cuidado hacia estas personas y las mascotas. “Es fundamental aislar a los animales y ser conscientes de que los fuegos artificiales no solo afectan a las mascotas, sino también a las personas y al medio ambiente”, concluye la especialista.
