El arte textil boliviano llegó a la tercera versión de la Feria Original, que se celebró en México del 17 al 20 de noviembre. Isabel Polo y Patricio Mamani mostraron las técnicas que usan los pueblos indígenas en la elaboración de su indumentaria, además participaron en un desfile de modas.
Isabel Polo es una artesana nacida en la comunidad de Irupampa, Chuquisaca, su pasión por el arte textil se inició desde niña, cuando veía cómo sus padres y abuelos confeccionaban su vestuario. Esas experiencias las contó en el diálogo titulado ‘Recuperación de técnicas y transmisión de saberes’, evento organizado por la Feria Textil de México.
Patricio Mamani es un artesano cochabambino que dirige la Asociación Arte Andino, cuya sede se encuentra en esa misma ciudad. Su participación en el evento internacional estuvo enmarcada en el diálogo ‘La producción y el acceso a materias primas’, donde destacó el uso de productos originales como un aspecto primordial en la confección de sus prendas.
“Me gusta la palabra original porque mediante ella hacemos conocer que es un producto bien elaborado e incluso hecho a mano”, dijo Mamani en una entrevista a medios mexicanos.
El artesano explicó además que en Bolivia hay diferentes fuentes de materia prima para la confección de las prendas, entre ellas la lana de alpaca, oveja, llama, vicuña, entre otras.
“Mostramos muchas técnicas que usaban ya nuestros ancestros, podemos decir que también fue un intercambio cultural de enriquecimiento de saberes entre los pueblos”, agregó.
Los artesanos llevaron un catálogo de textiles bolivianos a la feria que se expuso en el estand boliviano.
El encuentro textil culminó con una pasarela de modas que exhibió las prendas expuestas, la artesana Isabel Polo participó en esa muestra. “Fue una bonita experiencia compartir con otros pueblos”, agregó Polo.
Sobre la feria original
La feria es organizada por el Gobierno de la República de México con el objetivo de dar a conocer los bordados tradicionales de ese país. Original es un movimiento cultural permanente, dedicado a crear conciencia sobre el valor del trabajo artesanal y los derechos de la propiedad colectiva. Este año, por primera vez, el evento contó con la participación de destacados artesanos de varios países del mundo, entre ellos Argentina, Colombia, Canadá, Palestina, Perú y Bolivia. El lugar donde se desarrolló la feria fue en la tradicional residencia de Los Pinos.