Un estreno exitoso fue el que tuvo Bolivia en el Campeonato Sudamericano sub-20 que se lleva a cabo en Cali, Colombia.
La ‘Verdecita’ se impuso a Venezuela por la mínima diferencia (1-0) gracias la anotación de uno de los futbolistas que juega fuera de Bolivia: Fernando Nava. El extremo, perteneciente al Athletico Paranaense de Brasil, hizo alegrar a sus compañeros a los 52 minutos del segundo tiempo y le permitió al equipo de Pablo Escobar sumar su primer triunfo en el campeonato.
En líneas generales, la selección boliviana mostró un buen desempeño, especialmente en ofensiva. La ‘Vinotinto’ pudo llegar al empate, pero la pólvora de sus delanteros estuvo mojada. Algunos de los jugadores nacionales que más se destacaron ante los venezolanos fueron Miguel Villarroel, Yomar Rocha, Lucas Chávez, Bruno Poveda y el ya mencionado Fernando Nava. Así fue la victoria de Bolivia en su debut en el Sudamericano sub-20.
Bolivia presiona y Poveda aparece para negarle el gol a Venezuela
El elenco nacional salió a presionar para tener el control del balón desde los primeros minutos del juego. Venezuela hizo lo propio.
En los primeros 10 minutos, la Verdecita se acercó al área contraria principalmente por la banda izquierda con Fernando Nava.
Pese a sentar presencia en campo defensivo del rival, Venezuela generó la primera jugada clara del partido. A los 13’, Andrés Romero descargó un remate directo al arco por el carril central que fue contenido sin rebote por Bruno Poveda.
La presión de Bolivia en la marca bajó su intensidad después de los 20 minutos. El juego se hizo más frecuente en la mitad de la cancha y también las imprecisiones de parte de ambos equipos.
Cuando transcurrieron los 27’, Denilson Durán regaló la pelota mientras jugaba en campo defensivo y le permitió a Andrés Romero rematar directo a portería por segunda vez en el partido. Nuevamente, Poveda intervino oportunamente con un manotazo que mandó la pelota al tiro de esquina. Fue la jugada más clara en ofensiva de la primera parte.
En el tramo final del periodo inicial, Bolivia se acercó más al arco de Venezuela por la banda derecha con Yomar Rocha, pero no pudo disparar en ningún momento al pórtico de Samuel Rodríguez. Después de tres minutos de adición, ambos conjuntos se fueron al descanso sin la sensación de que haya habido un dominador del juego.
Nava rompe la paridad y le da su primer triunfo a Bolivia
Venezuela hizo un cambio para encarar el segundo tiempo. Bolivia se mantuvo con los mismos hombres.
La Vinotinto estuvo cerca de abrir el marcador a los 46’ con un cabezazo de Kevin Kelsy en el área penal que pasó cerca del poste de Bruno Poveda.
El 0 se rompió en el primer ataque peligroso de Bolivia. Al minuto 52, Miguel Villarroel asistió a Fernando Nava, quien desde el flanco izquierdo remató fuerte al segundo palo con la cara interna de su botín derecho. La pelota no pudo ser despejada por Samuel Rodríguez pese a que se estiró e ingresó al fondo de las redes. Los jugadores de la Verdecita festejaron el 1-0 del encuentro con euforia.
Con un cambio hecho a los 58’ (ingresó Efraín Morales en lugar de Nava*), Bolivia reforzó su defensa y jugó de manera menos agresiva. Los venezolanos se volcaron al ataque, pero el equipo nacional siguió generando peligro, especialmente de contragolpe.
La imprecisión ofensiva de Venezuela también fue un factor para la victoria de Bolivia. Al menos en tres oportunidades, los jugadores de la Vinotinto desperdiciaron chances claras de concretar al empate entre los 60’ y el final del cotejo.
El cuadro de Pablo Escobar también estuvo cerca de liquidar el pleito con un remate cruzado de Fabricio Quaglio a los 88’ por la banda derecha que el guardameta Rodríguez despejó al córner. Luego de 8 minutos de adición y un último remate de los venezolanos que contuvo Bruno Poveda, la Verdecita se quedó con el triunfo y sumó sus primeras tres unidades en el campeonato.
El próximo enfrentamiento de la selección boliviana sub-20 será ante Ecuador. Este partido se jugará el próximo domingo desde las 17:00.
*Quien sintió un estirón en las piernas luego de barrerse al piso para intentar despejar un balón.