El Verdao aprovechó los innumerables errores defensivos de la Academia
Palmeiras le arrebató este jueves el liderato del grupo C al Bolívar, al que goleó por 4-0 para firmar la mejor campaña de toda la fase de grupos de la Copa Libertadores y asegurarse el factor cancha en los cruces eliminatorios.
El conjunto brasileño cimentó la victoria en diez minutos inspirados de la primera mitad que desembocaron en los tantos Rony (m.24), tras un pase de espuela de Raphael Veiga, y Artur, de cabeza a centro de Piquerez (m.34).
El lateral izquierdo marcaría en la recta final (m.76), tras una buena combinación con Veiga, y Artur, entre calambres, pondría la puntilla al contragolpe (m.85).
Ninguno de los 32 equipos de esta fase de grupos del torneo ha sumado los 15 puntos del cuadro dirigido por el portugués Abel Ferreira. Campaña perfecta de no ser por la derrota encajada en casa precisamente del Bolívar en la primera jornada (3-1).
Una mancha que este jueves se encargó de limpiar en un Allianz Parque de Sao Paulo que vio el mismo bloque sólido y efectivo que conquistó las Libertadores de 2020 y 2021.
La escuadra boliviana fue un desastre en defensa, aunque estará en la ronda de octavos como segunda de grupo (12 puntos). Cerro Porteño y Barcelona de Guayaquil se quedaron fuera.
Palmeiras salió sin prisa, pero sin pausa. Con el colombiano Richard Ríos en el once titular, el cuadro verdiblanco se fue acercando a la meta defendida por Lampe por inercia.
Rony estuvo siempre al acecho. El internacional brasileño es sinónimo de intensidad.
Pieza indiscutible, volvió a demostrar que es la referencia del ataque palmeirense, muy por encima de Endrick, la joven promesa atada por el Real Madrid, hoy de nuevo en el banquillo.
Su gol fue marca de la casa. Error en la salida del balón del Bolívar, Veiga se inventa un pase con la espuela y Rony domina con el pecho dentro del área y bate a Lampe medio cayéndose.
Diez minutos después llegaría el segundo, el primero de Artur.
Con sus 1,68 metros de altura, el atacante se elevó más que nadie y cabeceó un centro medido de Piquerez.
Del Bolívar, muy poca cosa a excepción de un trallazo de José Sagredo que hizo entrar en calor a Weverton.
En el arranque de la segunda etapa apareció de nuevo Lampe para despejar in extremis un disparo colocado de Gabriel Menino desde fuera del área.
El partido entró entonces en modo ahorro, con los visitantes intentando asustar tras la entrada del español Pablo Hervías y los locales a la espera de un contragolpe definitivo.
La sentencia llegaría, sin embargo, en una buena jugada de asociación entre Veiga y Piquerez, que culminó el defensa uruguayo dentro del área.
Aún habría tiempo para el doblete de Artur, que anotó entre calambres para desesperación del cuadro de La Paz. El mejor Palmeiras ha vuelto.