La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) procedió al decomiso de 200 garrafas de gas en tiendas domésticas de la ciudad de Quillacollo, Cochabamba, y anunció procesos penales contra 11 familias que acumulaban gas licuado de petróleo con el fin de lucrar, reportó radio Pío XII de la red Erbol.
El director ejecutivo Germán Jiménez, dijo que está prohibido almacenar garrafas de gas con fines lucrativos y anunció que las 200 garrafas pasarán directamente a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Boliviano (YPFB).
La entidad advierte que esta actividad representa una amenaza para la seguridad de la población, por la desviación de los canales regulares de distribución que afecta directamente la economía de los ciudadanos.
Explicó que la empresa estatal procederá a la verificación técnica de las garrafas y una vez certificadas, volverán a ingresar al mercado interno.
“Esto (las 200 garrafas) ya no se devuelven y a estas 11 familias se les van a iniciar procesos penales, en esto tenemos que ser claros, porque el que comercializa o el que almacena sin autorización de la ANH, acuerdo al Art. 226 Bis del Código Penal, de 3 a 6 años privativos de libertad”, declaró.
La autoridad informó que estas acciones son parte de los operativos que se realizan a nivel nacional.
En ese marco, informó que en días pasados se intervino a tres talleres clandestinos para la conversión a GNV poniendo en riesgo la seguridad del plan de conversión de la matriz energética.
Aseguró como entidad están velando por el abastecimiento de carburantes y destacó los avances en la reducción del contrabando de combustible en las fronteras, con una disminución en la comercialización en fronteras del 20%, gracias a la presencia activa de la ANH y las fuerzas militares en estas zonas.
