La administración del presidente Luis Arce tiene sus proyecciones económicas para este 2023 y trabaja en ese norte de crecimiento con justicia social, afirmó la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, en alusión al reciente reporte del Banco Mundial.
También destacó que el crédito de $us 500 millones, recientemente aprobado en Diputados, está en la línea trazada por el Gobierno de responder a las necesidades de la población en áreas como el fortalecimiento del sistema de salud.
Alcón explicó que las metas económicas del Gobierno están inscritas en el Presupuesto General del Estado, que para este 2023 prevé una tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 4,86%, una tasa de inflación de 3,57%, un resultado fiscal de -7,49% y estabilidad cambiaria.
“Nosotros tenemos nuestras propias proyecciones, estamos seguros, como ya en una oportunidad lo dijo el presidente Arce, ‘una vez más vamos a decepcionar a los distintos organismos internacionales’”, afirmó.
El Banco Mundial (BM) mantiene a Bolivia entre las tres economías con mejor proyección de crecimiento de la región en 2023, aunque prevé que estará cifrada en 2,5%.
En un contexto externo adverso, Bolivia mantiene una inflación controlada, subvención a hidrocarburos y otros productos, entre otras medidas enmarcadas en un modelo que apuesta a la inversión pública, redistribución de la riqueza e industrialización con sustitución de importaciones.
Alcón destacó que el crédito de $us 500 millones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) irá a fortalecer las iniciativas destinadas a los sectores de menores ingresos económicos.
“La beneficiada es nuestra población, no queremos verlos perjudicados más aún en un contexto adversos en lo internacional, nosotros estamos dando esa dinámica en acciones como inversión pública”, explicó.
En el Legislativo están pendientes de aprobación otros créditos internacionales.