La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, afirmó este viernes que la compra del oro nacional para fortalecer las Reservas Internacionales Netas (RIN) permitirá proteger la economía nacional en un contexto internacional adverso.
“Lo que transmitimos a la Asamblea y al país es reconocer la importancia de utilizar nuestro oro nacional para fortalecer nuestras RIN”, señaló Alcón en un mensaje en su cuenta de Twitter.
Señaló que “esta estrategia global protegerá la economía en un contexto internacional adverso para continuar en la reconstrucción económica de Bolivia”.
Luego de 15 horas de debates, que se inició la noche del jueves, la Cámara de Diputados aprobó la mañana de este viernes, en su estación en grande, el Proyecto de Ley 219/2022-2023 de compra de oro destinado al fortalecimiento de las reservas internacionales.
El tratamiento en detalle de la norma debía continuar la tarde de este viernes, sin embargo, el presidente de la Cámara de Diputados, Jerges Mercado, informó que decidió postergar la sesión para el día sábado a las 14h00.
El proyecto tiene el objetivo de autorizar al Banco Central de Bolivia (BCB) la compra de oro del mercado interno para el fortalecimiento de las reservas internaciones y efectuar operaciones financieras con las reservas internacionales en oro en los mercados externos.
El artículo 4 del proyecto de ley señala que el BCB pagará “en moneda nacional” por el oro que compre en el mercado interno “tomando como base el precio de la cotización internacional del oro en condiciones competitivas”. Para ello el ente emisor tiene que aprobar un reglamento, una vez que sea promulgada la norma.
El oro adquirido por el BCB “podrá ser refinado en el exterior para obtener la calidad de barra de buena entrega y conforme a reglamentación emitida” por la entidad, apunta el artículo 7 de la norma.
Según proyecciones oficiales, la aprobación de este proyecto podría generar al menos $us 1.200 millones, mejorando significativamente las Reservas Internacionales Netas (RIN) del país, destaca un reporte de la Cámara de Diputados.
Luego de la ruptura del orden constitucional que llevó al país, en 2020, a un decrecimiento de la economía en un 12,7%, la pandemia del Covid-19 y los efectos de la guerra Rusia-Ucrania, el gobierno presido por Luis Arce concretó que en 2021 el Producto Interno Bruto (PIB) de Bolivia llegue al 6,1%.
Mientras al segundo trimestre del 2022 el indicador de crecimiento llegó al 4,1%, la inflación cerró esa gestión en 3,12%, una de las más bajas del mundo.
Para este año, el Gobierno nacional proyecta una tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 4,86%, una de inflación de 3,57%, un resultado fiscal de -7,49% y estabilidad cambiaria.