El mandatario atribuyó los problemas económicos a la coyuntura política internacional y a los bloqueos nacionales que paralizaron al país durante 40 días en 2024.
Para el presidente Luis Arce, el país no enfrenta un periodo de recesión ni avizora un aumento en la inflación. A su criterio, la economía nacional tiende a crecer gracias a las políticas económicas aplicadas por su Gobierno, las cuales son ampliamente criticadas por sectores de oposición y muchos economistas.
En una evaluación, hizo un repaso a los inconvenientes que tuvo que atravesar su Gobierno durante los últimos meses para enfrentar los conflictos sociales, principalmente impulsados por la facción “evista” y luego con la subida de precios de algunos productos de la canasta familiar.
Además, garantizó que la inflación de Bolivia “al lado de otros países, es moderada”.
El Presidente indicó que la reducción de aranceles en la importación de varios productos permitió que los precios comenzaran a bajar; sin embargo, sus detractores señalan que las medidas adoptadas para paliar la crisis se centran en la reducción del gasto público y el cierre de empresas estatales deficitarias, entre otras.
“No tenemos recesión, seguimos creciendo, aunque se desacelere la economía”, aseguró Arce este lunes en un encuentro con periodistas en la ciudad de La Paz.Por otro lado, diversos analistas y economistas aseguran que el país ha experimentado una disminución significativa de la actividad económica y un aumento generalizado y sostenido de los precios.