La familia apunta a los dos uniformados como los responsables del crimen y denuncian que lo mataron a raíz de una disputa por una herencia familiar. Los policías eran cuñados de la víctima.
El crimen sucedió el pasado 30 de junio, el cuerpo de Edgar Paco fue hallado sin vida en plena vía de la zona San Roque de la ciudad de El Alto, tenía heridas de puñal. Sus agresores eran los cuñados, dos efectivos de la Policía Boliviana que fueron enviados a la cárcel con detención preventiva en las horas precedentes.
“El juez determinó en audiencia la detención preventiva en el centro penitenciario de San Pedro de la ciudad de La Paz por el lapso de cuatro meses”, indicó el abogado Fabián Ávalos.
El jurista puntualizó que los uniformados son procesados por “el delito de asesinato, el cual se ha podido determinar mediante las pruebas colectadas y determinar el grado de participación”, sostuvo.
La familia apunta a estas dos personas como los responsables del delito, sostienen que lo mataron a raíz de una disputa por una herencia familiar.
“A mi primo le han botado, nueve puñaladas le han dado y lo han botado en San Roque”, denunció Carmen Quispe en su momento.
“Pido justicia, sus propios cuñados (son los autores), ellos son policías, son sargentos”, urgió.
La víctima era una persona que trabajaba como taxista. Tras su desaparición, la familia lo reportó como desaparecido. Semanas después, lo hallaron sin vida
“Le han querido quitar su casa y su auto, ha sido por interés”, señaló la mujer.
Ahora, los allegados y familiares de la víctima exigen justicia y que los autores de la muerte del taxista sean castigados con la pena máxima de 30 años de presidio.