La Paz.- El cierre definitivo de la estación de Transferencia de La Paz Bus de la calle Wenceslao Argandoña se suma a otras deficiencias como la falta de rutas y la ausencia de un plan de autosostenibilidad de los buses PumaKatari, afirmó este viernes la concejal Roxana Pérez del Castillo (MAS).
Esa situación demuestra, dijo la autoridad edil, la ineficiencia y la falta de voluntad de optimizar el servicio por parte del gobierno municipal.
La concejala Pérez del Castillo anunció que en los próximos días presentará un informe de la fiscalización al servicio de transporte PumaKatari.
“Sumado al cierre de la estación, claramente se ve que no hay voluntad política para promover este servicio en condiciones óptimas. No se tiene las rutas desde hace dos años, y un año y medio es de responsabilidad del señor (Iván) Arias, ¿es tanta la ineficiencia de la gestión?”, enfatizó.
La estación de calle Argandoña fue cerrada el jueves de forma definitiva. Según información del Servicio de Transporte Municipal (Setram), no se producían los cambios de ruta de los buses como estaba previsto inicialmente.
La edificación inaugurada en julio de 2016 fue diseñada para que los usuarios del PumaKatari puedan intercambiar el servicio entre rutas. A la estación llegaban los buses de las rutas Irpavi, Chasquipampa, Villa Salomé e Integradora.
“Cierran estaciones importantes para promover el servicio de transporte integral. Se debe integrar a buses PumaKatari, los minibuses, servicio público, teleférico para dar un mejor servicio a la población”, afirmó Pérez del Castillo.
Desde hace algún tiempo existen observaciones a este servicio de transporte, que la población paceña subvenciona el 80% del servicio, recordó la concejala.
La legisladora señaló que el alcalde Iván Arias informó que el servicio de los buses PumaKatari no es autosostenible.
“Esto preocupa porque se hizo una inversión millonaria para contar con este servicio y es un servicio importante porque resuelve el problema de transporte masivo que necesita la población paceña”, dijo.
Sin embargo, cuando los concejales como fiscalizadores solicitaron al gerente del Setram el plan de autosostenibilidad, la respuesta fue que no lo tiene.
Apuntó también que el servicio esta mermado supuestamente por la falta de buses, por lo que se adquirieron una nueva flota de 66 automotores “que fueron involucrados en una licitación extraña” con posible sobreprecio.
“Además, se tardó más de dos años que arriben los buses, arribaron en abril de esta gestión y estamos meses esperando que el ejecutivo edil asigne rutas, razón por la cual los buses están botados en un parqueo a la intemperie a vista y paciencia de las autoridades”, enfatizó.
Pérez del Castillo no descarta que el ejecutivo edil promueva las condiciones para una forma de privatización de este servicio.
